Confesó Padrastro Abusador

[Cauquenes] Luis Rosales confesó que había abusado de su hijastra. "¡Me tentó el diablo!", dijo.
Quedó libre. Luis Rosales Orellana fue acusado por su hijastra de 12 años, de haber sido víctima de diversas tocaciones íntimas por parte del sujeto.
Cauquenes. Luis Rosales Orellana (46) llegó a su casa ubicada en Los Conquistadores, pasaje Francisco de Aguirre, en horas de la tarde de anteayer, después de trabajar podando viñedos en los alrededores de esta ciudad.
No había nadie en el interior de la morada, salvo su hijastra J. R.R.T. (12), que estaba recostada en su cama.
De pronto, el hombre abrió la puerta del dormitorio. Muy despacio se acercó a su hijastra. Empezó a acariciarla en diversas partes del cuerpo. Ella se defendió. Salió corriendo a la calle pidiendo auxilio. Unos vecinos la socorrieron. Uno de ellos, hermano de la niña, al saber lo ocurrido, dio cuenta a Carabineros de la Cuarta Comisaría y a la vez, la guardia encomendó al personal del retén estación que concurrió al domicilio de la afectada, constatando los hechos denunciados.

El Diablo
Carabineros ingresaron al interior del domicilio de Rosales. El hombre reconoció sus bajos instintos y fue detenido. De esto fue informado el fiscal Francisco Ávila Calderón, quien solicitó a la SIP de la Cuarta Comisaría para indagar. Lograron los efectivos establecer fehacientemente que el padrastro no era primera vez que intentaba abusar sexualmente de J. R. R. T. "Ella no lo había denunciado por temor a su integridad, presumiendo (nosotros) que pudo haberse encontrado amenazada por el inculpado", indicó el fiscal.
Rosales, dijo que "el Diablo se me había entrado en el cuerpo; me tentó"...

Medida Cautelar
Durante la audiencia de control de la detención, el fiscal Ávila acusó a Rosales de reiterados abusos en contra de su hijastra, lo que se remontaban desde hacía tiempo, según las declaraciones formuladas por la afectada.
La defensa del imputado alegó como atenuante el reconocimiento de lo obrado por el acusado. Al final de la contienda, el juez Mauricio Aravena, luego de analizar lo ocurrido con la mayor profundidad a la luz de los antecedentes, decidió que Rosales Orellana debía abandonar su casa y no acercarse por ningún motivo a la menor. Debe firmar diariamente en el retén de Carabineros del barrio Estación; no debe abandonar la provincia de Cauquenes, quedando libre.
Al fiscal Francisco Ávila no le gustó para nada el resultado de la audiencia. Él pidió prisión preventiva mientras se esclarecen los hechos "por considerarlo un peligro para la ciudadanía". Dijo a La Prensa que apelará la resolución del magistrado dentro de los próximos cinco días, tal como lo aconsejan las disposiciones legales.
[3 de julio de 2008]
[©la prensa]