[Los Ángeles] Condena sin derecho a ningún beneficio. Rubén Suárez Vivanco fue sentenciado a 20 años de presidio mayor en su grado máximo, como autor del delito de parricidio perpetrado en contra de su esposa, Juana Martínez, el 10 de mayo del 2007. Condena sin derecho a ningún beneficio.
El Tribunal Oral en lo Penal de Los Ángeles condenó, este jueves, a 20 años de presidio efectivo, sin derecho a ningún beneficio a Rubén Suárez Vivanco, como autor del delito de parricidio de su esposa, Juana Martínez Martínez (25), a quién en mayo del 2007 arrojó por un acantilado de 60 metros, en la comunidad de Malla Malla en Alto Bío Bío.
La determinación fue tomada por la segunda sala del tribunal angelino, luego de tres días de juicio donde rindieron declaración, más de 30 testigos y peritos.
Uno de ellos, la hermana de la víctima, Clorinda Martínez quién con gran entereza relató los acontecimientos.
"Él empujó a mi hermana desde la orilla del sendero y ésta se detuvo unos 30 metros abajo. Bajó tras ella, la sostuvo, y la arrojó nuevamente. Esta vez, Juana habría rodado otros 50 metros. Para asegurarse de cumplir con su objetivo, el inculpado –según la familiar de la occisa- descendió hasta donde quedó tendida la mujer, la segunda vez, tomó tres piedras y, por lo menos con una de ellas, golpeó a la moribunda, no sólo en una oportunidad, principalmente en la cabeza".
Si bien, la defensa de Suárez reclamó que el hecho fue "un accidente", los magistrados -Carlos de Borguie, Pamela Pino y Christian Osses- validaron la tesis del homicidio de la mujer y estimaron que el hombre era culpable del delito que el Ministerio Público le imputaba, por lo que tendrá que permanecer privado de libertad 20 años, a partir de la fecha de detención, 11 de mayo del 2007.
"Se Hizo Justicia"
En este caso, también era parte querellante el Servicio Nacional de la Mujer, a través del Centro Mirabal de Los Ángeles.
La seremi de la cartera de la mujer, Rina Oñate, quién se hizo presente en la lectura de sentencia, manifestó que como Sernam están conformes con la condena "algunas de las peticiones que estaba haciendo el defensor, que era tener consideración a la irreprochable conducta, el juez, el tribunal no la aceptó, de tal manera que estamos conformes. El que estos 20 años sean sin ningún tipo de beneficios también nos deja tranquilos, esperamos que está sea una buena noticia para la comunidad de Los Ángeles y, por cierto, para los habitantes de Malla Malla".
Además, Oñate recalcó que "creemos que en los casos de violencia intrafamiliar, no se puede estar aduciendo intachable conducta, más aún en este caso cuando quedó absolutamente probado que Juanita Martínez era permanentemente, víctima de violencia intrafamiliar en el interior de su casa".
Notablemente afectada, Clorinda Martínez, hermana de la víctima manifestó su tranquilidad por la condena, al mismo tiempo que recalcó que como familia no perdonan al inculpado "la muerte de mi hermana no va a quedar impune, se hizo justicia, a mi hermana nunca más la veré, no como ellos (la familia de Rubén) que lo van a ver cuando quieran. Estoy contenta, 20 años no es suficiente pero por lo menos no quedará impune la muerte de mi hermana. Aún así, nunca lo perdonaré, él mató a mi hermana de una forma muy cruel".
Asimismo, la familia de la víctima, por medio de un comunicado público, condenó la acción de algunas instituciones que –según señalan- se prestaron para dar buenas recomendaciones del femicida. Entres estas, hicieron referencia a la Fundación O.C.A.C, Municipalidad de Alto Bío Bío, a través de su alcalde Félix Vita; el candidato a concejal por la cordillerana comuna, Guillermo Curriao y la Fundación Juan XXIII.
"Estas instituciones públicas y privadas, nos dejan en claro que no están velando por el interés general y el bienestar de las familias que hoy han sido víctima de la violencia intrafamiliar, lo cual se refleja en este caso al incentivar o avalar los asesinatos y crímenes que ha quedado impune en las comunidades de Alto Bío Bío", enfatizan.
Este parricidio ocurrió, el 10 de mayo de 2007 cuando Suárez arrojó a su esposa Juana Martínez, por una zanja; primero 30 metros, y luego otros 50, para finalmente rematarla, golpeándola en repetidas ocasiones con una piedra en el cráneo. Todo esto, con los ancianos padres de la víctima y el pequeño hijo de ambos como espectadores de la cruenta escena.
Caso Ejemplificador
Este es el primer caso de femicidio en la región en que se logra la máxima condena por este delito.
"Como Sernam, consideramos que la máxima condena por un delito de estas características, es una clara señal de que la violencia en contra de las mujeres es un hecho de extrema gravedad que requiere de sanciones duras y ejemplificadoras", señaló la directora regional de Sernam, Rina Oñate.
Cabe recordar que ésta es la primera sentencia por un juicio de femicidio y el primer caso en la región en que el Servicio Nacional de la Mujer formó parte de la querella. Durante el juicio, la familia fue patrocinada por el Sernam, por lo que se interpuso una querella para reforzar la acción penal en contra del parricida. La institución, junto con la fiscalía solicitó se aplicara la pena máxima (20 años).
[26 de julio de 2008]
[©tribuna]
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26 julio 2008
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