Amenazan de Muerte a Chacal

[Valparaíso] Chacal de Valparaíso no pudo dormir por los gritos de los reos y en la mañana pidió un sacerdote. Asesino de niña pasó noche de pesadilla por amenazas de muerte.
Fiscal Pablo Gómez ordenó peritajes siquiátricos para descartar cualquier enfermedad mental del imputado. También espera los análisis de ADN a un vello púbico, sangre y otros restos biológicos hallados en la ropa y cuerpo de la menor.
De pesadilla fue la primera noche de Juan Saavedra Espinoza (37 años) en la cárcel de Valparaíso. El violador y asesino de la menor Francisca Silva Benavides (5 años) no pudo dormir por los gritos de los reos que lo amenazaban de muerte. En la cultura carcelaria, los criminales que atentan contra los niños son los peores y si quedan al alcance de los internos, son ajusticiados.
Durante toda la noche los reclusos le gritaron "¡apenas podamos te vamos a torturar y te vamos a matar, desgraciado, infeliz!", lo cual era acompañado por insultos de grueso calibre. Saavedra quedó tan mal, que ayer en la mañana solicitó hablar con un sacerdote. El capellán Maurice Alvarado le dio apoyo espiritual y también le entregó algunos enseres.
Debido a las amenazas, Gendarmería lo aisló y dispuso medidas especiales para no sólo resguardar a Saavedra del resto de la población penal, sino que también para evitar que se suicide. De momento, el imputado se encuentra en una celda individual del módulo 7, con la puerta permanentemente abierta y vigilancia visual durante las 24 horas del día.
Ayer trascendió que familiares de la pequeña víctima, asesinada el sábado pasado en el Cerro Los Placeres, cumplen sentencias en ese penal por porte ilegal de arma de fuego y asalto. Es tanto el riesgo que corre Saavedra en este recinto carcelario, que incluso no podrá salir al patio. Además, las visitas, si es que las recibe, podrán verlo sólo a través de un vidrio.
Según se supo, es poco lo que ha hablado Saavedra desde que llegó a la cárcel de Valparaíso. A algunos gendarmes comentó que sabía lo que le esperaba y que estaba resignado. Sus únicas actividades han sido los peritajes siquiátricos que ordenó el fiscal Pablo Gómez para descartar cualquier enfermedad mental del imputado.
Saavedra también solicitó ducharse, afeitarse y cortarse el pelo, según informó el alcaide del penal, comandante Germán Aguirre. "Está tranquilo, pero muy ensimismado", añadió.

Pruebas Clave
El fiscal también está a la espera de los resultados definitivos de algunas pruebas que serán clave en el juicio. Por ejemplo, necesita confirmar sin lugar a dudas que el material orgánico hallado en la ropa interior de la menor pertenece efectivamente a Saavedra. También si la sangre encontrada en un calcetín y calzoncillo del sujeto son de la niña y no de la pareja del imputado, Jocelyn Aros.
Otra de las evidencias encontradas en las prendas de vestir de Francisca es un vello púbico que será sometido a pruebas de ADN. En el cuerpo de la menor también se hallaron restos biológicos, entre ellos una mancha que parece ser de semen y que también es objeto de peritajes bioquímicos y de ADN para verificar su naturaleza y procedencia.
El fiscal Gómez tiene un plazo de 90 días para reunir las pruebas que presentará en el juicio. Los delitos que imputa el prosecutor son violación con homicidio y sustracción de menores. El primero tiene asignada una pena de presidio perpetuo efectivo, es decir, 40 años tras las rejas antes de pensar en cualquier beneficio, y el segundo, 10 años de cárcel.

Abandonado
Juan Saavedra "se encuentra" abandonado", según dijo el alcaide Germán Aguirre. Nadie fue a visitarlo en su primer día de reclusión, ni siquiera su abogado, el defensor público Marcos Schmitt.
El familiar más directo de Saavedra, su padre, sufrió un infarto al enterarse de que su hijo era el autor del crimen que conmocionó a Valparaíso. Las dos hijas de Saavedra lo verán cuando la situación "se tranquilice".
[8 de agosto de 2009]
[©la nación]