robaron m&h soldaduras y equipos

[Talcahuano] Asalto a mano armada en empresa del puerto.
Tres sujetos ingresaron a plena luz del día y se llevaron más de 2 millones de pesos.
Los tres sujetos armados entraron y salieron caminando posiblemente por el pasaje lateral Lircay.
Tres individuos premunidos con armas de fuego asaltaron ayer el local de la empresa M&H Soldaduras y Equipos, ubicada en la avenida Colón 2512 en Talcahuano. Los sujetos entraron a las 15:30 horas vestidos con uniformes naranjos, los cuales tenían estampados el nombre de la empresa Preservas en la espalda.
Los individuos irrumpieron en el local apuntando sus armas al personal de la empresa y preguntando dónde se encontraba el dinero. Les ordenaron tenderse en el suelo y les propinaron algunos golpes al administrativo Luis Candia, quien se encontraba trabajando en la contabilidad, y al vendedor Rodolfo Soto.
Manuel Garcés, jefe de sucursal, señaló que eran jóvenes delgados de unos 30 años. Uno de ellos lo apuntó con una escopeta y vio que otro portaba una pistola.
Posteriormente encerraron a los cinco funcionarios de la empresa, en una sala posterior, de la cual lograron salir cuando los sujetos huían.
Los individuos sustrajeron cerca de 1 millón 200 mil pesos, más un par de máquinas de 80 mil y un taladro magnético avaluado en 500 mil pesos.
El atraco se realizó en aproximadamante diez minutos y los desconocidos al parecer habrían escapado a pie.
Según Garcés "esto viene a coronar una serie de intentos sistemáticos de robo a este local desde hace dos años".
El encargado del local, contó que todos los días deben cerrar alrededor de las seis de la tarde debido a que el sector es muy peligroso. En octubre del año pasado entraron a robar pero nunca habían sido víctima de un asalto a mano armada a plena luz del día, como ocurrió ayer.

Riesgo Total
Armando Zapata Leal, vendedor de la empresa sintió que corría riesgo su vida mientras era encañonado por los asaltantes.
Disimuladamente, escondió su chequera y el celular con una mano mientras los desconocidos exigían a gritos todas las posesiones personales. El vendedor contó que en ningún caso volvería a correr ese riesgo.
Al resto de sus compañeros les quitaron celulares, documentos y otras especies menores.
Contó, además, que la semana pasada desconocidos habían roto la pandereta trasera para ingresar cerca de la 1:30 de la madrugada, pero al instante sonó la alarma que los ahuyentó.
[28 de julio de 2007]
[©el sur]