[Calama] La víctima del delito no alcanzó ni siquiera formular la denuncia cuando ya los efectivos policiales habían practicado la detención.Audaz asalto y robo afectó a una de las recepcionistas de un céntrico hotel de Calama, pero gracias a la oportuna acción de Carabineros, el delito fue frustrado rápidamente.
La situación quedó al descubierto alrededor de la una y media de la madrugada de ayer, cuando una patrulla de Carabineros realizaba rondas rutinarias de prevención dentro de los límites del Cuadrante Número Uno.
A esa hora, los efectivos policiales rondaban por las calles Latorre y Pedro León Gallo y, sorpresivamente, observaron que ante la presencia del vehículo policial, un individuo echó a correr por la calle Latorre en dirección al norte, por lo que optaron por perseguirlo.
Rápidamente le dieron alcance y la hacerle control de identidad y revisarle sus vestimentas le hallaron en su poder una caja negra y una llave de boca, de esas que usan los mecánicos.
El hombre, para no complicarse la existencia optó por renunciar a su derecho a guardar silencio y en menos de los que canta un gallo, dijo que la caja negra la había robado desde un hotel ubicado en la calle Pedro León Gallo.
Que la llave era de su propiedad y que siempre la andaba trayendo consigo.
En el Hotel
Ante esa declaración, los carabineros llevaron al individuo hasta el hotel y una vez en el lugar se entrevistaron con la recepcionista, quien les dijo que, hacía una media hora, el individuo había ingresado al establecimiento, que la amenazó con una arma (la llave de mecánico) y le obligó a que le entregara dinero.
Enseguida el individuo sustrajo la caja, donde habían 97 mil pesos y 72 dólares y saltó por el mesón de atención para escapar.
Reconoció la especie como propiedad del hotel.
Ante esa realidad, el individuo fue llevado al Servicio de Urgencia para constar lesiones y luego lo detuvieron para ponerlo a disposición del fiscal.
[14 de agosto de 2008]
[©mercurio de calama]
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