[Arica] La Fiscalía confía en nuevos datos aportados por examen de la PDI, pero la defensa desvirtúa esa convicción.Un sujeto que desde agosto permanece en prisión preventiva bajo cargos de parricidio de su pequeña hija de sólo un año y medio de edad, fue reformalizado por la fiscalía, la que agregó al crimen el delito de violación de la menor.
El imputado Julio Tola Quispe (33) es investigado por la muerte a golpes de su pequeña hija, Andrea Esthefany Tola Apata, ocurrida el 30 de julio, en su domicilio de la población Campo Verde.
Es la segunda reformalización contra el sospechoso, pues ya en una oportunidad anterior el fiscal de la causa, Richard Toledo, hizo precisiones a los antecedentes de la carpeta de investigación del Ministerio Público.
El delito de ultraje de la niña, que en un principio sólo era una presunción de la Fiscalía, ahora aparece acreditado por los resultados de unos exámenes practicados por el Laboratorio de Criminalística de (Lacrim) de la Policía de Investigaciones (PDI), dijo el fiscal.
"Creo que sí. O sea, reconstruyendo lo que sucedió ese día, con las pruebas que existen, creo que sí hubo violación", sentenció la autoridad.
A la luz de este nuevo panorama, el encarcelado arriesga penas separadas por los delitos de parricidio y violación.
Además, el fiscal manifestó que pronto presentará la acusación por este caso.
Sobre las motivaciones que llevaron al individuo a cometer el delito, precisó que "él sólo ha dicho que le golpeó el estómago porque lo estaba molestando".
Defensa
En tanto, el abogado defensor particular del sospechoso, Michel Marín Urrutia, desvirtuó la creencia de la fiscalía que la niña murió debido a los golpes de su padre, añadiendo que "probablemente hay otros hechos que pueden explicar el deceso de la menor".
También dijo que el resultado del examen que respalda la hipótesis de la violación "no es tan categórico como afirma el Ministerio Público en la reformalización".
[19 de noviembre de 2008]
[©estrella de arica]
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