Intentó Suicidio Quemándose

[Valparaíso] Se quemó a lo bonzo porque le quitaron a sus dos hijitos. Madre se roció con combustible y ardió como una antorcha humana.
En el hospital Carlos Van Buren agoniza una joven porteña, quien afectada por una fuerte depresión decidió acabar con su vida. Para ello se roció con combustible y se prendió fuego.
El dramático caso se registró la tarde del lunes al interior de un cité ubicado en calle Eloy Alfaro frente a calle Prieto.
En un departamento del segundo piso una mujer identificada como Tabita Elizabeth Díaz Umatino (24), decidió poner fin a su existencia. Provista de una botella de bencina, empapó su cabeza y ropas y se encendió con un fósforo, convirtiéndose en una pira humana. Fue socorrida por residentes del sector quienes la apagaron. Carabineros no encontró testigos presenciales del hecho, pero si alterado el sitio del suceso.
Una ambulancia del REI trasladó a la lesionada hasta la posta adulto del centro asistencial porteño, donde los médicos de turno le diagnosticaron más de un 80% de su cuerpo quemado.
De acuerdo a la información policial, Tabita presentaba problemas de índole mental por una adicción a sustancias psicotrópicas y alcohol, ya que frecuentaba sectores de expendio de licores a los pies del cerro Barón.

Consternados
Manuel Díaz y Claudia Figueroa, padre y madrastra de la joven, se mostraron consternados una vez que la visitaron en la sala de recuperación. Se encuentra irreconocible por las quemaduras al punto que si bien tienen claro que es su hija, se harán muestras de ADN para verificarlo.
La directora del Van Buren, Dra. Beatriz Bueno, tuvo la triste misión de informarles que la ciencia médica no podía hacer algo, y que el desenlace fatal era cuestión de horas o días.
Tabita es la segunda de siete hermanos. El mayor pereció hace un par de años atropellado en Viña del Mar.
Sus parientes cuentan que a los 17 años se embarazó de su primer hijo, hoy de cinco años, y luego se casó con su pareja, con quien engendró un segundo hijo de apenas un año. Señalan que sufrió de violencia intrafamiliar de su cónyuge, que hoy se encuentra privado de libertad por robo.
Tabita se sumergió en el mundo de las drogas, y en dos ocasiones abandonó centros de rehabilitación en Arica y Santiago. También fue tratada en Valparaíso. Hace unos meses el Tribunal de Familia de Limache, donde residía, decidió arrebatarle la tuición de sus pequeños hijos que están en hogares de menores, situación que alteró su ánimo al punto que esta semana anunció a sus cercanos sus intenciones de morir. Así lo confirma Zuliana Araya, presidenta de Afrodita, quien la conoció en la calle. "Anunció que iba a matarse porque no le devolvían a sus hijos", comentó.
[Fabián San Martín]
[20 de febrero de 2008]
[©estrella de valparaíso]