Abuso Sexual en Aldea SOS

[Puerto Varas] El director se defiende precisando que la institución se hizo parte en la querella criminal interpuesta por el caso. El supuesto agresor, además de ser el transportista escolar del establecimiento, era el padrino de la niña.
Un caso de abuso sexual ocurrido al interior de la Aldea SOS de Puerto Varas, denunció María Vera, madre de la menor supuestamente afectada.
Según consta en una querella criminal interpuesta el 25 de septiembre en el Juzgado de Garantía de Puerto Varas, la menor habría sido abusada en 2006 por Juan Carlos Rivera, quien se desempeñaba como chofer del vehículo de transporte escolar de la aldea, y quien además era el padrino de bautizo de la víctima.
"Durante cuatro años fue acosada en el furgón escolar. La tocaba en forma indebida y le mostraba revistas pornográficas, hasta que finalmente trató de abusar de ella", dijo la madre que hizo la denuncia en la Policía de Investigaciones de Puerto Montt.
La mujer dio a conocer los hechos durante una audiencia realizada en el Juzgado de Familia de Puerto Varas, donde se estaba en proceso para que la niña pueda volver a su hogar.
María Vera también acusó al director de la Aldea SOS de la ciudad lacustre de tratar de esconder lo ocurrido.
"A principios de 2008, el director vino a mi casa y me ofreció plata o cualquier cosa que le pida para que esto no se supiera. Cuando yo no quise aceptar, el dijo: va a ser su palabra contra la mía", relató la madre de la niña.
Otra hija de la mujer, María Díaz, hoy es mayor de edad, pero pasó su infancia en la institución de Puerto Varas.
La joven recordó que durante su permanencia en la aldea, una de las tías que están a su cuidado le comentó que un joven de 13 años había violado a un niño el que aún vive en esa institución.
"Después de eso vino el director y nos dijo que todo esto no lo podíamos comentar con nadie; a mí y a la tía Mirka nos llamó aparte. Esto pasó hace 6 años aproximadamante", dijo.

Útiles Escolares
Por su parte, Jorge Téllez, director de la Aldea, dijo que el relato de ambas mujeres no corresponde a la realidad.
"Lo que se le ofreció fueron materiales de estudio y vestuario, dado a que ella estaba en un programa de reinserción familiar, en el cual puede volver a vivir con su familia", dijo
"Creo que hay alguien detrás de la madre, para a enlodar la institución, y a mi persona", concluyó el encargado del núcleo.
[3 de diciembre de 2008]
[©el llanquihue]