5 Años por Abortos Reiterados

[Santiago] En resolución unánime, Corte Suprema mantuvo condena para padrastro y su hijastra. Cinco años para pareja que abortó sus siete hijos.
El fallo establece que Ramón Pardo y Jacqueline López engendraron siete niños, cuya vida interrumpieron para luego deshacerse de ellos. Sus restos aparecieron en una fosa séptica, un entretecho y un lodazal.
En un fallo unánime, la Segunda Sala de la Corte Suprema confirmó ayer la condena de cinco años de presidio efectivo para la pareja que abortó a siete de sus hijos entre 1994 y 2001 en la localidad de San Sebastián, en la Quinta Región, y la comuna de Colina, en Santiago.
Con este dictamen, los magistrados ratificaron la pena impuesta por la ministra en visita Dobra Lusic quien, tras una investigación de tres años, estableció que Jacqueline López González y Ramón Pardo Valenzuela mantuvieron relaciones sexuales a escondidas por un período de siete años debido a que el hombre era originalmente el conviviente de la madre de la sentenciada.
Esta situación clandestina los llevó a ocultar en reiteradas oportunidades los sucesivos embarazos de la mujer, quien tras abortar procedía a deshacerse de cada uno de los fetos.
Según el dictamen de primera instancia -confirmado por el máximo tribunal- está acreditado que la pareja eliminó "en enero del año 1994 (...) un feto ocultado en el entretecho de una residencia de la localidad de San Sebastián; entre los años 1995 a 1998 (...) a lo menos a un feto lanzado a un pozo séptico de (un) inmueble en la ciudad de Colina, lugar de residencia de los intervinientes, y en el año 2001, (...) a dos fetos enterrados en el sector conocido como Las Chancheras, en la misma ciudad", reseña el fallo.
Así los ministros Nibaldo Segura, Jaime Rodríguez, Rubén Ballesteros, Hugo Dolmestch y el abogado integrante Óscar Carrasco confirmaron la sentencia dictada contra la pareja, la que ya había sido ratificada por la Corte de Apelaciones de Santiago el 21 de enero último.

Celos
El caso se destapó en enero de 2003, cuando Pardo Valenzuela (entonces, de 45 años) arrebatado por los celos acusó a la hija de su conviviente de haberse hecho siete abortos.
La denuncia resultaba extraña pero poco a poco comenzó a revelarse la verdadera historia que había detrás. En realidad, Pardo Valenzuela había iniciado una relación sentimental paralela con la joven mujer a comienzos de los noventa, cuando ella tenía sólo 12 años.
La sentenciada estuvo embarazada en siete oportunidades, una de ellas de mellizos. En cada oportunidad, esta especie de padrastro la asistió como partero y luego la ayudó a deshacerse de los fetos.
Durante el período en que estuvo con Pardo Valenzuela nació sólo un niño, M.L.L, que ahora bordea los 16 años.
El resto de los hijos de la pareja corrió una suerte muy distinta. Cuando la policía comenzó a realizar las primeras diligencias en la casa que tenían en el balneario de San Sebastián y en el domicilio de Colina se encontró con restos de fetos enterrados en el patio, un pozo séptico, en un lodazal y en un entretecho.
Estos hallazgos conmovieron en 2003 a la opinión pública, por lo que a pocos días de destapado el caso, la Corte de Apelaciones de Santiago designó a una ministra en visita para que dirigiera la indagatoria.
La jueza Dobra Lusic luego de tres años de investigación condenó a cinco años sin beneficios a la pareja, pena confirmada por el tribunal de alzada y la Suprema.
[Andrea Chaparro]
[25 de julio de 2008]
[©la nación]

5 Años por Matar a Sus 6 Hijos

[Colina] Asesinaron y enterraron en San Sebastián a uno de sus hijos. Desalmada pareja fue sentenciada a cinco años y un día de cárcel por abortar seis hijos y sepultarlos en un lodazal y fosas sépticas en Colina y el balneario del Litoral Central.
La Corte de Apelaciones de Santiago confirmó la condena a cinco años y un día de presidio efectivo en contra de los desalmados padres que entre los años 1994 y 2001 asesinaron y enterraron a seis hijos, uno de ellos sepultado en un lodazal en una vivienda del balneario de San Sebastián, comuna de Cartagena.
La pena, que había sido impuesta el año 2006 por la ministra en visita Dobra Lusic, fue ratificada por la Cuarta Sala del tribunal de alzada en contra de Ramón Pardo Valenzuela (50) y Jacqueline López González (30).
Los inescrupulosos padres fueron considerados autores de delitos reiterados de aborto, hechos cometidos contra sus seis hijos en San Sebastián y en la comuna de Colina.

Estremecedor Caso
El estremecedor caso quedó al descubierto en enero de 2003, cuando Pardo, conviviente de la madre de Jacqueline López, denunció a la joven por haber asesinado a sus hijos.
Se iniciaron así las investigaciones que arrojaron que Pardo mantuvo una relación paralela con la joven desde el '91, producto de la cual hubo seis embarazos, uno de ellos de mellizos. El primer niño sobrevivió, pero los restantes fueron enterrados y lanzados a un lodazal y a un pozo séptico.
En enero de 2003 un equipo especializado de Carabineros -compuesto por médicos legistas, antropólogos y detectives- trabajó con palas mecánicas en el patio de una casa de la comuna de Colina y la macabra historia comenzó a confirmarse.
Los policías encontraron restos de cuatro de los seis recién nacidos que fueron muertos y enterrados por sus padres.

San Sebastián
A partir de ese momento los ojos fueron puestos en un domicilio de la localidad de San Sebastián, donde había sido sepultada la primera de las inocentes víctimas.
Los parricidas confesaron que el año '94 dieron muerte al recién nacido y lo enterraron en el patio de una propiedad ubicada en el balneario de San Sebastián, noticia que generó consternación en el popular balneario cartagenino.
La investigación del espeluznante caso esclareció que en la medida de que la mujer iba dando a luz, los lactantes eran ahogados por sus padres.
Fueron enterrados en un lodazal en San Sebastián y en los años posteriores, lanzados a un pozo séptico en la comuna de Colina.
Incluso se supo que una pareja de mellizos fueron muertos e inhumados en un criadero de cerdos.

Violaciones
Los antecedentes señalan que antes de vivir con Jacqueline López, Pardo convivió con la madre de ésta, por lo que no se descarta que algunas de las víctimas correspondan a niños nacidos producto de violaciones contra la jovencita. Este habría sido el principal argumento esgrimido por los culpables para justificar lo injustificable.
Ahora, Ramón Pardo y Jacqueline Valenzuela deberán pasar los próximos cinco años de sus vidas tras las rejas, para muchos una pena que no refleja la gravedad de los macabros hechos.
[Rafael Sarmiento]
[7 de febrero de 2008]
[©líder de san antonio]

Presidio por Abortos

[Santiago] Confirman presidio para pareja acusada de abortar seis hijos.
La pena será de 5 años y un día de presidio sin beneficios.
La Cuarta Sala de la Corte de Apelaciones de Santiago, en votación unánime, ratificó la sentencia que aplicó una a la pareja que a raíz de una relación clandestina que mantuvieron durante una década, sepultó los fetos de sus hijos en un lodazal y en fosas sépticas.
De acuerdo a los antecedentes, el tribunal de alzada capitalino confirmó las condenas dictadas contra Ramón Pardo Valenzuela (43) y Jacqueline López González (27) quienes deberán volver a la cárcel tras ser sindicados como los autores de los delitos reiterados de aborto, cometidos en las localidades de San Sebastián y Colina entre los años 1990 y 2001.
El caso se remonta a enero del 2003, cuando Pardo Valenzuela, quien era conviviente de la madre de Jacqueline López, denunció a la joven, de haber asesinado a sus hijos. Pero, a poco andar de la investigación, se descubrió que ambos tuvieron una relación sentimental paralela, de la cual hubo varios embarazos (uno de ellos, mellizos).
El primer niño nació y sobrevivió bajo la excusa de que la mujer había sido violada por un desconocido. Pero el resto corrió el destino fatal: un feto fue enterrado en el patio de una vivienda en San Sebastián (Quinta Región); dos más, los mellizos, terminaron en un lodazal de Colina denominado "las chancheras"; otro, en el fondo de una fosa séptica en el mismo domicilio de ambos, ubicado en la calle Aconcagua, de la misma comuna, emplazada al norte de Santiago.
La causa fue fallada en primera instancia por la magistrada Dobra Lusic. En la indagatoria, la jueza estableció que cuando la mujer puso fin a su relación con Pardo y se involucró con otra persona, el sujeto, evidentemente despechado la denunció a la policía, intentando exculparse de los abortos.
De los cuatro casos comprobados, la jueza que inicialmente había calificado como infanticidios, modificó los delitos imputados concluyendo que sólo se trató de abortos. Otros dos cuerpos no fueron hallados pese a que la pareja confesó haber asesinado a seis de sus hijos.
La defensa de Jacqueline López González buscaba justificar su actuar aduciendo que estas practicas se fundaron tras de haber sido violada sistemáticamente por Ramón Pardo desde los 12 años de edad y que los embarazos y abortos fueron el resultado de esos ultrajes.
De acuerdo a informaciones de Terra, el tribunal fundamentó su resolución en que los procesados López y Pardo, por largo tiempo mantuvieron relaciones sexuales clandestinas por ser el hombre el conviviente de la madre de la imputada.
[25 de enero de 2008]
[©la tercera]