01 agosto 2007

pistoleros aterrorizan a vecinos

[Viña del Mar] Los afectados viven encerrados con temor que una bala loca los alcance.
Un cuchillo de unos 25 centímetros de hoja y ensangrentado en el antejardín de una vivienda fue la gota que rebasó el vaso para los vecinos del sector de Santa Julia, en Viña del Mar.
Ello por lo atemorizados que viven debido a un grupo de jóvenes o pandillas se reúnen cada fin de semana en su sector y desatan batallas campales.
"Desde un tiempo a esta parte nos hemos transformado en un pueblo sin ley y lamentablemente hay tan pocos carabineros para tanta gente que siempre llegan tarde cuando algo pasa", dijo Hermelinda Cisternas, secretaria de la Junta de Vecinos Nueva Santa Julia.

Balacera
Los hechos se generan entre jueves y domingo especialmente, en calle Dionisio Hernández con Carlos Dittborn, en el paradero 3 y 1/2.
"Aquí hay astillas de palos donde se agarran a palos entre ellos, quiebran botellas y esta mañana apareció el cuchillo con sangre que debe haber sido de la pelea que hubo anoche, como casi todas las noches", expresó la vecina.
Uno de los problemas que a ellos más los atormenta es que las últimas semanas se han escuchado balazos que los sujetos disparan al aire, lo que los tiene prácticamente sin dormir.
Entre ellos pelean a combos, se pegan con palos o se amenazan y se cortan con botellas quebradas y cuchillos, "que se maten entre ellos, pero con los disparos nos involucran a todos", dijeron.
"Hay construcciones de material ligero y una bala las puede atravesar y matar a alguien. Me dan miedo las balas perdidas porque ni siquiera se matan unos contra otros, sino que disparan para arriba y uno corre el riesgo de que entre una bala a una casa", expresó Hermelinda Cisternas.

Antes Era Tranquilo
Ernesto Pérez y José Santos Fernández son dos vecinos que viven desde hace décadas en ese sector y nunca habían visto una situación igual a la que viven ahora.
"Dos balazos escuchamos en la mañana, tenemos miedo, ya no salimos y pasamos encerrados, parten el día jueves. Aquí antes no volaba ni una mosca y ahora tan malo que está. Esa es la droga", dijo Ernesto Pérez.
Por su parte, José Santos Fernández acotó que "a mi no me dejan dormir, me golpean la puerta para molestarme, me rallan la casa. No tenemos enemigos ni nada, pero no faltan".
Los vecinos temen ser objeto de represalias por parte de estos individuos aunque también siente impotencia al estar con las manos atadas.
"Da rabia, nunca antes habíamos tenido esto, vivimos amenazados por esta gente. Vinieran un sábado a eso de las 12.00 de la noche y se van a topar con el show, vienen por cuadras peleando", dijo otro vecino que no quiso identificarse.
[Carla Olivares]
[1 de agosto de 2007]

estrella de valparaíso]

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