
Su inmensa habilidad a la hora de atacar a las víctimas, volvió muy complicadas las labores realizadas por la policía civil y el Ministerio Público. Y es que según fuentes de la fiscalía, se trataría de un hombre que no dejaba evidencias y que actuaba inteligentemente en los distintos sitios del suceso. De éstos, sus preferidos eran las inmediaciones del aeródromo María Dolores de dicha ciudad en donde acechaba en complicidad con un segundo sujeto.
Los blancos perfectos para este tipo que se dedicaba a recolectar metales, eran las parejas que llegaban a este lugar a pasar un momento de intimidad.
En ese lugar, ellos se encontraban con estos hampones, quienes a parte de violar a las mujeres, le robaban sus pertenencias.
Tras la captura de uno de ellos, ayer se practicó la audiencia de control de la detención en el Juzgado de Garantía y en la cual, la fiscal Mariana Ramírez solicitó ampliar el plazo hasta hoy, día en que se le formalizará, a eso del mediodía.
Por su parte, la Brigada de Delitos Sexuales y Menores (Brisexme), de la Policía de Investigaciones de Los Angeles en conjunto con un equipo especializado de Santiago, siguen realizando pesquisas para dar con el paradero del segundo involucrado e investigando otros supuestos casos en los cuales el detenido también habría participado.
Según los primeros antecedentes recabados, el Ministerio Público hoy estaría en condiciones de acreditar siete de estas once denuncias con pruebas tan contundentes como los resultados de exámenes de ADN.
[1 de septiembre de 2006]
[©crónica]
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