[San Antonio] Atentado incendiario a profesor. Afectado denunció que autores del violento ataque serían los propios estudiantes de Eisa, donde se desempeña desde hace 33 años.
Aburrido de los constantes ataques y hostigamientos que lo afectan en su propio hogar en la población El Faro, el profesor e inspector de la Escuela Industrial de San Antonio (Eisa), Rafael Ramírez León (64 años), denunció el violento ataque incendiario del que fue víctima junto a su familia.
El hecho estuvo a punto de provocar una tragedia, luego que un grupo de menores, según testigos de entre 10 y 15 años de edad, llegó cerca de la medianoche del domingo hasta la residencia particular del docente y actual inspector del tradicional establecimiento técnico, ubicada en calle Los Torreones.
De acuerdo a lo manifestado por el educador, los muchachos lanzaron, a través de una ventana, una bengala que usan las embarcaciones en caso de emergencias en el mar, la que emanaba gran cantidad de humo color salmón.
El artefacto rompió un vidrio y estuvo a punto de provocar un incendio de proporciones al interior del inmueble, donde el afectado permanecía junto a su mujer, cuatro hijos y una nietecita de apenas 3 años.
"Alcancé a correr una cortina cuando sentí que se quebró un vidrio y una fuerte explosión. La casa se llenó de humo, imagínese si se provoca un incendio con todos adentro", manifestó con preocupación.
Pese al temor de que el artefacto pudiese explotar, como pudo lo tomó y lo lanzó a la calle.
Sospecha de Alumnos
Para Rafael Ramírez no hay dudas respecto a quiénes son los autores del atentado. "Son alumnos de la escuela. Acá existen más de 40 casas y a la única que le lanzan piedras es a la mía", manifestó resignado.
Estos incidentes se han registrado desde hace dos años a la fecha. Incluso para Año Nuevo recibió una lluvia de proyectiles, quedando con varios vidrios rotos.
La techumbre de su hogar ha sufrido gran deterioro debido a esta situación y en una oportunidad logró identificar a un estudiante, el que luego fue expulsado.
De esta situación están al tanto el jefe de personal, el administrador y el director del colegio.
Aterrados
Tal realidad ha traído graves secuelas entre la familia del profesor. Su esposa aseguró que "estamos todos muy asustados. Siento alguna bulla y nos da pánico, ya que aquí por lo general es tranquilo. Parecía que la casa iba a arder por los cuatro costados con todo el humo que salía", recordó.
El profesor de diseño y confección de muebles, piensa que por su actual cargo de inspector, le ha valido la antipatía de algunos estudiantes. "Soy de los pocos que no se hace el leso con lo que pasa en la escuela. La disciplina parece que no le gusta a todos", afirmó resignado.
[25 de septiembre de 2007]
[©líder de san antonio]
25 septiembre 2007
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