[Santiago] Fiscalía pide 83 años de cárcel para ‘La Quintrala'. María del Pilar Pérez arriesga 2 perpetuas por homicidio de de Diego Schmidt-Hebbel y el doble crimen de calle Infante.
Un total de 83 años de cárcel, en los que se incluyen 2 penas perpetuas, arriesga desde hoy María del Pilar Pérez sindicada como la autora mediata de los crímenes del joven Diego Schmidt-Hebbel y de su ex esposo, Francisco Zamoran, y la pareja de este Héctor Arévalo, en Providencia.
El fiscal de la Fiscalía Metropolitana Oriente, Carlos Gajardo, presentó este martes la acusación judicial a 10 meses de iniciada la investigación luego de la muerte del primero en manos de José Ruz, considerado el sicario de la mujer apodada por sus vecinos como ‘La Quintrala'.
El Ministerio Público pidió la misma pena de 2 presidios perpetuos para este último formalizado como el autor material de los asesinatos en ambos casos y contra el que pesa como agravantes el actuar bajo promesa y la alevosía.
"Presentamos acusación en el día de hoy en contra de los imputados María del Pilar Pérez López y Jose Mario Ruz Rodríguez por los delitos por los cuales han sido formalizados previamente", dijo Gajardo.
Lo anterior, detalló, por "los delitos de parricidio y homicidio calificado ocurrido el día 23 de abril del año 2008 y robo con homicidio consumado en la persona de Diego Schmidt Hebbel y frustrado en contra de otro grupo de personas ocurrido el día 4 de noviembre del año 2008".
En el caso de la mujer, se consideran 83 años de cárcel porque, además de las dos penas de perpetuas por 40 años cada una, se piden 3 años y un día de presidio por el intento de asesinato de su nuera Monserrat Hernando, en otro incidente cuando la empujó por una escalera.
Pérez López (57) fue formalizada como autora mediata del crimen del economista Diego Schmidt-Hebbel, pololo de su sobrina Belén Mplina, registrado en el acceso de la casa de su cuñado Agustín Molina en la calle Seminario, a pasos de avenida Rancagua.
En este caso, contra Ruz pesan las pericias médico-legistas que habrían logrado establecer que el joven economista presentaba una herida cortopunzante, la cual pudo habérsela propinado el llamado sicario al momento del forcejeo donde recibió un disparo que terminó con su vida.
Además la Fiscalía imputó a la ‘Quintrala', el mismo ilícito en el caso de su ex esposo Francisco Zamorano, y su pareja homosexual Héctor Arévalo en la casa que estos habitaban en la calle José Manuel Infante.
[15 de septiembre de 2009]
[©la nación]
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16 septiembre 2009
09 junio 2009
Sicario Reconstituye Crimen por Encargo

Un complejo operativo policial en que participan efectivos de Gendarmería, Carabineros y la Policía de Investigaciones, resguardan a esta hora la reconstitución de escena del crimen del economista Diego Schmidt-Hebbel en la calle Seminario de Providencia.
José Ruz Rodríguez, asesino confeso e imputado como sicario de María del Pilar Pérez, quien le pagó, de acuerdo a la investigación, para matar a su cuñado Agustín Molina, describe a los fiscales paso a paso el forcejeo con el joven que terminó con su muerte.
Un hombre, aparentemente funcionario de Investigaciones, representa a la víctima, mientras a la distancia el procedimiento lo observa Agustín Molina, el tío de la polola de Schmidt-Hebbel, Belén Molina, quien se asegura era quien debía ser asesinado por el asesino a sueldo a raíz de una disputa por herencias en la familia de Pérez.
Al bajar del vehículo que lo trasladó desde la Cárcel de Alta Seguridad, Ruz fue mirado fijamente a los ojos por el padre del fallecido, el ex ejecutivo del Banco Central, Klaus Schmidt-Hebbel, quien permanece entre las personas que pudieron acceder al perímetro de seguridad.
La diligencia, encabezada por el fiscal de la Zona Oriente, Carlos Gajardo, fue decretada luego de la petición de la defensa de los imputados por este crimen la sindicada como autora intelectual del mortal ataque y el sicario Ruz Rodríguez. Hasta ahora sólo este último ha sido presentado en el lugar.
[9 de junio de 2009]
[©la nación]
15 mayo 2009
La Quintrala Los Quería Matar a Todos
[Santiago] Polola de Diego Schmidt-Hebbel: "Todos íbamos a ser asesinados... Diego estaba en la lista". En entrevista con Revista Caras, Belén Molina, recuerda el crimen del joven economista y señala que Diego sentía miedo por el daño que Pilar Pérez le podía hacer.
A seis meses del crimen del economista Diego Schmidt-Hebbel, su polola Belén Molina rompió el silencio y por primera vez se refirió a los hechos que rodearon el asesinato del joven.
En entrevista a Revista Caras, la joven, sobrina de Pilar Pérez, realiza una inédita revelación: "La muerte de Diego no fue un accidente, él también figuraba en la lista de personas que debíamos ser asesinadas".
A lo largo de su relato recuerda que el economista sabía del odio que su tía tenía por su familia y "sentía miedo por mí, que viviera al lado de ella (Pérez)".
Belén Molina agrega que Pilar Pérez siempre actuó movida por la disputa que existía por la herencia de su abuelo, algo que la hacía temer con algún desenlace fatal para ella o algún integrante de su familia.
"Muchas noches me dormía pensando que iba a incendiar la casa, mandar a robar porque su móvil era la plata (…) a ella no la considero un familiar, siempre fue el enemigo" agrega.
Respecto del crimen de Francisco Zamorano, el ex marido de Pilar Pérez, la joven asegura que siempre supieron que su tía estaba detrás del homicidio.
"Todo partió con la muerte de mi tío Pancho (Francisco Zamorano). En el minuto en que supimos, a la primera persona que indicamos fue a la señora Pilar Pérez, partiendo por sus propios hijos".
Diego Schmidt–Hebbel fue asesinado de un disparo la mañana del 4 de noviembre de 2008, al exterior de la casa de su polola en calle Seminario, de Providencia.
La investigación fiscal sindicaría a José Ruz Rodríguez como el autor material del crimen y a Pilar Pérez como quien le habría encargado concurrir al inmueble para asesinar a su cuñado y padre de la joven (Agustín Molina).
[15 de mayo de 2009]
[©la tercera]
A seis meses del crimen del economista Diego Schmidt-Hebbel, su polola Belén Molina rompió el silencio y por primera vez se refirió a los hechos que rodearon el asesinato del joven.
En entrevista a Revista Caras, la joven, sobrina de Pilar Pérez, realiza una inédita revelación: "La muerte de Diego no fue un accidente, él también figuraba en la lista de personas que debíamos ser asesinadas".
A lo largo de su relato recuerda que el economista sabía del odio que su tía tenía por su familia y "sentía miedo por mí, que viviera al lado de ella (Pérez)".
Belén Molina agrega que Pilar Pérez siempre actuó movida por la disputa que existía por la herencia de su abuelo, algo que la hacía temer con algún desenlace fatal para ella o algún integrante de su familia.
"Muchas noches me dormía pensando que iba a incendiar la casa, mandar a robar porque su móvil era la plata (…) a ella no la considero un familiar, siempre fue el enemigo" agrega.
Respecto del crimen de Francisco Zamorano, el ex marido de Pilar Pérez, la joven asegura que siempre supieron que su tía estaba detrás del homicidio.
"Todo partió con la muerte de mi tío Pancho (Francisco Zamorano). En el minuto en que supimos, a la primera persona que indicamos fue a la señora Pilar Pérez, partiendo por sus propios hijos".
Diego Schmidt–Hebbel fue asesinado de un disparo la mañana del 4 de noviembre de 2008, al exterior de la casa de su polola en calle Seminario, de Providencia.
La investigación fiscal sindicaría a José Ruz Rodríguez como el autor material del crimen y a Pilar Pérez como quien le habría encargado concurrir al inmueble para asesinar a su cuñado y padre de la joven (Agustín Molina).
[15 de mayo de 2009]
[©la tercera]
14 mayo 2009
Quintrala Pérez Escribe Carta
[Santiago] Revelan carta de Pilar Pérez a sicario para convencerlo de que se retractara. El fiscal Carlos Gajardo dio a conocer una misiva en la que la mujer intentó convencer a José Ruz de que se retractara de haber cometido el crimen de Diego Schmidt-Hebbel por orden de ella.
El fiscal a cargo de la investigación de los crímenes supuestamente cometidos por María del Pilar Pérez, Carlos Gajardo, dio a conocer esta tarde una misiva en la que la mujer intentó convencer al sicario José Ruz de que se retractara de haber cometido el crimen de Diego Schmidt-Hebbel por orden de ella.
El revelador antecedente fue dado a conocer, esta tarde, en el 8° Juzgado de Garantía de Santiago por el fiscal que investiga el crimen del joven economista, de Francisco Zamorano (ex esposo de Pilar Pérez) y de su pareja Héctor Arévalo.
"Hay que decir que Agustín (cuñado de Pilar Pérez) es el verdadero autor de todo esto, que se trataba de un auto-robo, pero falló. La idea era que él bajara con Belén (su hija)", precisa la carta.
En otro pasaje de la carta señala que "con esta declaración se daría un tremendo golpe a los fiscales. Hay que aplicar el factor sorpresa".
Niegan Libertad
Frente a estos antecedentes, el 8° Juzgado de Garantía de Santiago mantuvo el arresto preventivo para la mujer.
El tribunal consideró una vez más la arquitecta es un peligro para la seguridad de la sociedad. Esto, a una semana del cierre de la investigación de la Fiscalía Metropolitana Oriente.
La jueza Ema Tapia también mantuvo en prisión preventiva a José Ruz, mientras que la defensa de la mujer evalúa apelar a la resolución.
[Patricio Carrera]
[13 de mayo de 2009]
[©la tercera]
El fiscal a cargo de la investigación de los crímenes supuestamente cometidos por María del Pilar Pérez, Carlos Gajardo, dio a conocer esta tarde una misiva en la que la mujer intentó convencer al sicario José Ruz de que se retractara de haber cometido el crimen de Diego Schmidt-Hebbel por orden de ella.
El revelador antecedente fue dado a conocer, esta tarde, en el 8° Juzgado de Garantía de Santiago por el fiscal que investiga el crimen del joven economista, de Francisco Zamorano (ex esposo de Pilar Pérez) y de su pareja Héctor Arévalo.
"Hay que decir que Agustín (cuñado de Pilar Pérez) es el verdadero autor de todo esto, que se trataba de un auto-robo, pero falló. La idea era que él bajara con Belén (su hija)", precisa la carta.
En otro pasaje de la carta señala que "con esta declaración se daría un tremendo golpe a los fiscales. Hay que aplicar el factor sorpresa".
Niegan Libertad
Frente a estos antecedentes, el 8° Juzgado de Garantía de Santiago mantuvo el arresto preventivo para la mujer.
El tribunal consideró una vez más la arquitecta es un peligro para la seguridad de la sociedad. Esto, a una semana del cierre de la investigación de la Fiscalía Metropolitana Oriente.
La jueza Ema Tapia también mantuvo en prisión preventiva a José Ruz, mientras que la defensa de la mujer evalúa apelar a la resolución.
[Patricio Carrera]
[13 de mayo de 2009]
[©la tercera]
16 abril 2009
Se Querella contra Madre por Homicidio

Una nueva acción judicial en su contra sumará Pilar Pérez López, imputada como autora intelectual de tres homicidios ocurridos en Providencia en 2008. Esta vez su segundo hijo, el médico Juan José Zamorano, decidió hacerse parte en la investigación que la fiscalía de Ñuñoa sigue contra su madre, mediante la presentación de una querella.
La acción legal apunta al asesinato de su padre, el arquitecto Francisco Zamorano, quien el pasado 23 de abril fue hallado muerto junto a su pareja, Héctor Arévalo, con un disparo en la cabeza, en una vivienda de la comuna de Providencia. Según la fiscalía, ambas ejecuciones fueron encargadas por Pilar Pérez López al sicario José Ruz.
En la querella, Zamorano afirma que en 2007, Pilar Pérez contactó a Ruz "con el fin de solicitarle que buscara una persona para dar muerte a mi padre (...) y la persona que vivía con él". Agrega que, tras la insistencia de su madre, en abril de 2008 el sicario logra ingresar al domicilio de las víctimas, donde "Ruz se puso los guantes que traía consigo, extrajo una pistola con silenciador" y eliminó a Francisco Zamorano con un "disparo en la nuca". Añade que al día siguiente, Pérez pagó a Ruz dos millones de pesos.
Pilar Pérez también está formalizada por el crimen de Diego Schmidt-Hebbel, el novio de su sobrina, perpetrado por el sicario el pasado 4 de noviembre en Providencia.
La acción judicial de Juan José Zamorano, también presentada contra Ruz, se suma a la que presentó su hermana Rocío, también por el homicidio de su padre. Juan José Zamorano también denunció a la fiscalía la agresión de que fue objeto su novia en 2007, por parte de su madre, tras una discusión por su matrimonio.
Sospechas
El pasado 9 de septiembre, cuando el fiscal Patricio Caroca investigaba el doble homicidio de Providencia, el doctor Juan José Zamorano declaró en la indagatoria sus sospechas en orden a que detrás del crimen de su padre podría estar la mano de Pilar Pérez. Sin embargo, en ese entonces la fiscalía desestimó la participación de la mujer en el doble homicidio. Por estos asesinatos estuvo formalizado durante seis meses Claudio Soza, primo de una de las víctimas.
En diciembre pasado la fiscalía resolvió declarar inocente a Soza, luego que el sicario Ruz confesara ante los fiscales que él había perpetrado los crímenes por encargo de Pilar Pérez.
En su testimonio dijo que Pérez le ofreció dinero para eliminar a la familia de su hermana, debido a una disputa económica. Pero, el 4 de noviembre, cuando iba a cometer los homicidios, el joven economista se opuso al ingreso del sicario a la vivienda en defensa de su polola, por lo que fue asesinado.
Pese a que lleva cinco meses detenida, Pérez no ha querido declarar ante los fiscales respecto a su participación en los homicidios.
A fines de abril vence el plazo de la investigación que lleva el Ministerio Público en contra de la mujer y el sicario. Sin embargo, se estima que la indagatoria podría prolongarse por otros tres meses. La hermana y la propia madre de Pilar Pérez han presentado querellas en su contra por intento de homicidio.
[Consuelo Argandoña]
[16 de abril de 2009]
[©la tercera]
02 enero 2009
Sentencia a Madre e Hijo Parricidas

Como se recordará, Eugenia Araya y Melkon Sasso fueron sentenciados a 18 años de cárcel, sin beneficios, por el Tribunal Oral en lo Penal de Copiapó, condenados como coautores del delito de parricidio, tras contratar a un sicario para asesinar al padre de familia, Wilson Sasso, en noviembre del año 2006.
A su vez, el autor material del crimen, Mauricio Muñoz, fue sentenciado a 20 años de presidio, tras ser encontrado culpable del delito de homicidio calificado en grado consumado, con las calificantes de alevosía y previa promesa remuneratoria.
De acuerdo a lo indicado en su oportunidad por los jueces de la Tercera Sala del Tribunal Oral, tanto Eugenia Araya como su hijo Melkon Sasso planearon y contrataron al sicario Mauricio Muñoz, para que en su propio hogar diera muerte al padre de familia. Para esto, habrían acordado cancelarle 1 millón 200 mil pesos, de los cuales sólo alcanzaron a pagar 500 mil.
Tal como lo determinaron los magistrados, una vez que se perpetró el crimen en el segundo piso de la vivienda de población Litoral Azul, los imputados simularon un robo con homicidio, el que tras las diligencias policiales se descartó completamente.
[2 de enero de 2009]
[©diario de atacama]
14 diciembre 2008
La Otra Investigación de la Quintrala

Pese a son justamente las numerosas filtraciones a la prensa lo que ha permitido seguir los pormenores de la investigación de los crímenes supuestamente orquestados por María del Pilar Pérez López, la Fiscalía Oriente decidió abrir una investigación formal para determinar cómo llegó a la prensa la última confesión de José Mario Ruz Rodríguez, el hombre que la semana pasada admitió haber actuado en dos ocasiones como sicario contratado por la mujer, y cuyas palabras aparecieron publicadas íntegramente en el diario La Tercera.
El fiscal a cargo de la pesquisa que no es ninguno de los que están a cargo de la investigación principal, Vinko Fodic y Carlos Gajardo ha citado a declarar a algunos periodistas que ha seguido el caso.
La forma en que se obtuvo la confesión de Ruz, quien no contaba con la presencia de su abogado defensor, ha sido duramente criticada tanto por este último, Gonzalo Castro, como también por el jefe de Estudios de la Defensoría Penal Pública, Andrés Riutort, quien afirmó que dicha declaración no tiene validez si es que el imputado no la ratifica durante el juicio oral.
[14 de diciembre de 2008]
[©la nación]
Cómo Pasa Sus Días la Quintrala Pérez

Poca gente la visita. Una amiga incondicional y sus abogados vigilan los bienes que dejó y que podrían servir para afrontar eventuales compensaciones a las víctimas. Cuatro gendarmes no le quitan la vista de encima, mientras deambula por un pequeño patio o cuando permanece dentro de su celda. Así han sido los 38 días que ya cumplió detenida la imputada por el crimen más impactante de 2008.
Cada vez que en la televisión aparece una nota periodística sobre ella y se mencionan las pruebas en su contra, María del Pilar Pérez López refuta en voz alta; refunfuña indignada contra sus enemigos y advierte que todos se van a llevar una sorpresa.
Así pasa algunos de sus momentos la mujer sindicada como instigadora y autora intelectual, hasta ahora, del asesinato de tres personas. Bautizada por sus vecinos de calle Seminario como La Quintrala, Pérez se encuentra formalizada por el parricidio de su ex esposo, Francisco Zamorano; el homicidio calificado de Hernán Arévalo, pareja de Zamorano, y se levantaron cargos en su contra por el robo con homicidio de Diego Schmidt-Hebbel, el economista de 25 años cuya muerte dio origen a todo este caso, y por el robo con homicidio frustrado de los integrantes de la familia de Gloria Pérez, la hermana de María del Pilar: ésta, su marido Agustín Molina y la hija de ambos, Belén.
Desde que fue detenida, el 6 de noviembre, la arquitecta ha comparecido en tres oportunidades ante un juez de Garantía.
La primera vez que lo hizo estaba demacrada y depresiva, porque recién algunas horas antes había despertado del shock que le produjo la sobredosis de tranquilizantes con los que supuestamente quiso quitarse la vida, antes de ser descubierta y detenida por su participación en los crímenes.
Desde ese momento a su última comparescencia ante el juez, registrado el miércoles, ha variado mucho su apariencia. Cuida su peinado, su cara tiene buen aspecto y está atenta a todo lo que se dice durante la audiencia.
Pero no se preocupa de curiosear quién está en la sala ni menos se fija en quien tiene sentado a su lado: José Mario Ruz Rodríguez, el hombre que, hasta ahora, aparece como el verdugo que Pérez contrató para apretar el gatillo.
Días de Cárcel
Cuatro funcionarias de Gendarmería se ha transformado en las personas que más tiempo pasan con la mujer. A esta altura la conocen bien.
Son las encargadas de vigilarla día y noche en el Centro Penitenciario Femenino (ex COF) de San Joaquín, donde está recluida. Las autoridades carcelarias decidieron separarla del resto de la población de ese y ponerla en una sección especial, donde sólo tiene contacto con sus custodios.
La institución penitenciaria ha puesto mucho cuidado en mantener en buenas condiciones a la imputada, quien por estos días mantiene un tránsito permanente entre el penal y la Fiscalía de Ñuñoa, donde tienen su cuartel general Vinko Fodic, el fiscal jefe, y Carlos Gajardo, fiscal adjunto de la causa.
Los especialistas en seguridad de Gendarmería saben que, en los códigos internos de los reclusos, la justicia tiene su propia cara, y que frecuentemente los imputados terminan heridos.
En el caso de María del Pilar Pérez, su intento de suicidio y la antipatía que podía generar en los módulos comunes del CPF llevó a que su custodia estuviera a cargo exclusivo de la Unidad de Servicios Especiales Penitenciarios (Usep).
Es una sección que depende del Departamento de Seguridad de Gendarmería, encargada, entre otras cosas, del traslado de los reos. De esa dotación son las funcionarias que la cuidan, las que hacen turnos de cuatro horas para no perderla de vista.
"El objetivo es que tenga una custodia personalizada, que la funcionaria esté directamente con ella, al menos mientras dura su situación procesal, con objeto de evitar un suicidio o que intente autoagredirse. Hay que evitar que llegue al tribunal en malas condiciones", señala a LND un jefe de Gendarmería que pide no ser identificado por razones de seguridad.
La celda en la que La Quintrala pasa sus días tiene cuatro por tres metros. En ella hay una cama, una pequeña mesa y un sanitario.
Unos cuantos amigos y una de sus dos hermanas son los pocos que han ido a visitarla los días miércoles y domingo, que son sus días de visita.
Por el régimen en que se encuentra, Gendarmería permitió que le llevaran un televisor y una radio. Y todos los días lee los diarios que le prestan o que manda a comprar, porque también se le permite manejar algo de dinero.
Todos los días debe levantarse a las 7 de la mañana para el conteo y ducha. Una hora después puede salir de su celda y acceder al patio, donde se sienta a tomar el sol de la mañana. A las 18 horas, debe regresar a su celda, donde se le mantiene encerrada hasta el día siguiente.
La habitación tiene una pequeña ventana, que le permite recibir algo de luz, y la puerta tiene una ventanilla cerrada que las gendarmes cada cierto tiempo abren para mirar cómo se encuentra la detenida.
La misma autoridad penitenciaria cuenta: "A las funcionarias que la cuidan se les permite hablar con ella. Tienen que comunicarse, preguntarle cosas, necesitamos saber como se encuentra anímicamente, porque sirve para evaluarla".
Tiene derecho a tres comidas diarias, el llamado rancho: a las 8:30, a las 13 y a las 18 horas. En el mismo sector, entre el patio y su celda, tiene un espacio habilitado como comedor y para recibir visitas.
Hasta ahora, su régimen le permite recibir casi de todo, menos celulares, algunos artículos electrónicos y elementos que pueda utilizar para atentar contra sí misma o para burlar la seguridad del lugar. Todo se revisa, y las cartas que recibe o escribe son leídas.
Bienes
Hasta ahora, el manejo de los bienes de María del Pilar Pérez se mantiene en estricta reserva. Sin embargo, la mujer habría dado instrucciones a sus abogados, Pablo Larredonda y Cristián Bouchette, para velar por que no se haga ninguna modificación a la sociedad donde mantiene la mayor parte de su patrimonio, ni menos en la repartición de a herencia que dejó su padre, que habría dado origen a la tirria que sentía hacia su hermana y su cuñado.
La Sociedad Inmobiliaria, Inversiones y Servicios de Arquitectura Galiza Limitada fue creada en julio de 2006, con un patrimonio inicial de 96 millones de pesos.
El 90% pertenece a María del Pilar Pérez y el 10% restante a su hija, Rocío Zamorano Pérez. Originalmente, este último porcentaje estaba en manos del otro hijo de la arquitecta, Juan José Zamorano Pérez, pero las desavenencias de éste con su madre hicieron que optara por traspasar su propiedad a su hermana.
En dicha sociedad se deja la custodia de los derechos que la mujer tiene sobre los inmuebles que disputa con sus hermanas: los departamentos 21, 31 y 42 del edificio ubicado en calle Seminario 96, en Providencia.
En la contratación de los servicios de los abogados Larredondo (ex fiscal) y Bouchette (ex defensor público) se habría estipulado la garantía de parte de estos derechos para asegurar los honorarios de los profesionales.
Además, y más allá de las sanciones penales que podrían recibir Ruz y María del Pilar Pérez, en el momento en que se finalice la investigación y se dicten las acusaciones, las familias afectadas tienen derecho a exigir una compensación económica.
El abogado de la familia Schmidt-Hebbel, Juan Domingo Acosta, no descarta que éste sea el camino que emprendan sus representados.
"Se están considerando todas las acciones, incluidas las civiles que se puedan deducir en el momento procesal que corresponda, por lo tanto esto no es descartable".
[14 de diciembre de 2008]
[©la nación]
12 diciembre 2008
Allanan Casa de Sicario

Durante la jornada de ayer, efectivos de la Policía de Investigaciones (PDI) bajo la supervisión del fiscal Carlos Gajardo allanaron el domicilio de José Ruz Rodríguez, sindicado como el sicario contratado por la arquitecta María del Pilar Pérez para matar a casi toda su familia.
La diligencia tenía como objetivo hallar alguna de las armas utilizadas en el crimen de Diego Schmidt-Hebbel o la utilizada en abril pasado en el doble asesinato de Francisco Zamorano y su pareja Héctor Arévalo.
A pesar de diversas excavaciones realizadas en el patio del inmueble ubicado en calle 18 de Septiembre 11455, en La Florida, no se encontró bajo tierra fusil, pistola o revólver alguno.
Los policías gracias a Óscar Ruz Allende, tío del imputado, habrían encontrado en el primer piso de la vivienda un revólver que será analizado por el Laboratorio de Criminalística de la policía civil, pues si bien parecía de fogueo tenía un cargador en su interior. Asimismo, en horas de la tarde se halló un fusil Mauser que también será analizado.
El fiscal Gajardo llevó hasta el lugar a José Ruz para que orientara las pesquisas. Pasadas las 18 horas el carro celular que trasladó al imputado se retiró del lugar y, junto con ello, acabaron las diligencias.
Óscar Ruz dijo, frente a la situación que vive su sobrino, que "el billete verde cambia los corazones, pero yo exculpo a mi sobrino".
Agregó que desconfía de las últimas confesiones de Ruz, pues habría recibido amenazas en la cárcel y apuntaban a que si no se inculpaba cosas malas le pasarían a su familia.
Al respecto, dijo que él "desiste en decir la verdad, por las amenazas que recibe, las cuales le señalan que él debe asumir una responsabilidad que no tiene", aseguró su tío.
Esto último se condice con una posible nueva tesis del imputado quien, en los próximos días, declararía ante la Fiscalía que Pérez fue autora del homicidio de su esposo y que él sólo la habría ayudado ese día.
[12 de diciembre de 2008]
[©la nación]
Reformalizan a Quintrala Pérez

Por parricidio y homicidio fue reformalizada este martes a María del Pilar Pérez López, quien, según la investigación del Ministerio Público contrató a José Ruz como sicario para asesinar a su ex marido, la pareja de éste y posteriormente al novio de su sobrina.
En la audiencia, que por primera vez reunió en la misma sala a la denominada ‘Quintrala' y a su sicario, la Fiscalía Oriente acusó a la mujer de atentar contra la vida de su ex esposo, el arquitecto Francisco Zamorano Marfull en calidad de autora inductora, y del homicidio calificado de la pareja de éste, Héctor Arévalo, al pagarle a Ruz para que cometiera los asesinatos el 23 de abril de 2008.
Asimismo fue imputada del mismo delito (autora inductora) por el crimen del economista Diego Schmidt-Hebbel, novio de su sobrina María Belén Molina Pérez, cuando la intención era matar a toda la familia de ésta, compuesta por su padre, Agustín Molina, su madre y hermana de la formalizada, Gloria Pérez y la madre ambas María Aurelia López, en noviembre pasado.
En tanto, el sicario fue acusado de los homicidios calificados de Zamorano Marfull y Arévalo y robo con homicidio consumado en contra de Schmidt-Hebbel y de homicidio frustrado en calidad de no consumado de los integrantes de la familia Molina Pérez.
Todos los delitos imputados por el Ministerio Público se basaron en las declaraciones del autor material de los crímenes y de un hombre identificado con las iniciales E.H.G.P., a quien María del Pilar Pérez le habría pedido que consiguiera a un sicario para cometer el asesinato de sus familiares debido a problemas con la herencia dejada por su padre, lo que no se concretó y que redundó que volviera a contratar a Ruz, quien ya había efectuado el mismo trabajo en la residencia de su ex esposo.
A ello se suma, conforme a la investigación, que la formalizada ha incurrido en el mismo padrón de conducta para ordenar los asesinatos, como trató de hacerlo con quien fuera su pareja, Carlos Felip.
[11 de diciembre de 2008]
[©la nación]
08 diciembre 2008
Fue Su Hijo Quien La Denunció

Juan José Zamorano Pérez (28) comenzó su relato a las 11.46 del martes 9 de septiembre. Ante el fiscal adjunto de Ñuñoa, Patricio Caroca, el médico dio a conocer una sospecha preocupante: que su madre, María del Pilar Pérez López (56), estuviera involucrada en el crimen de Francisco Zamorano, su padre, y el de su pareja Héctor Arévalo. Ambos habían sido asesinados de dos tiros en la nuca el 23 de abril, en un crimen que tuvo las características de una ejecución.
"Debo señalar que en el momento en que supimos de la muerte de mi papá, yo le comenté a mi hermana que mi mamá podría estar involucrada, ya que no había sido un robo entonces, por las condiciones del homicidio, no se podía dejar de investigar", apunta este testimonio.
El hijo de Pilar Pérez declaró también que su madre había golpeado a su novia, actualmente su esposa. Además, recordó otros episodios de violencia protagonizados por la mujer, como el que tuvo con Carlos Felip, quien fue pareja de Pilar. "Se suponía que mi mamá había contratado a alguien para agredirlo o algo así (...) mi mamá dijo que todo era una mentira y que era un montaje".
La declaración del profesional consta en la carpeta de investigación del doble homicidio y se suma a otra evidencia contra la mujer: el 6 de mayo, un correo anónimo enviado a la Fiscalía Oriente alertaba que Pilar Pérez podría estar implicada en el doble homicidio.
Ambas pistas, según se asegura en la fiscalía, fueron investigadas sin resultado concreto. Pero paralelamente Claudio Soza, de 75 años, era acusado del crimen, formalizado y encarcelado, tras una ‘confesión' que prestó en el cuartel de la Brigada de Homicidios (BH) siete días después de los asesinatos y que ahora denuncia que le fue arrancada bajo engaños y presiones. La investigación estaba a cargo del fiscal Caroca, bajo las órdenes del fiscal jefe de Ñuñoa, Vinko Fodich.
Según se aseguró a La Tercera en la fiscalía, "Juan José, sin darnos una razón, dijo que creía que su mamá estaba involucrada. Eso nos motivó a pedir informes a la Dirección General de Movilización Nacional para saber si ella tenía armas inscritas a su nombre. Además, se encarga a la BH una investigación del tráfico de llamados de las víctimas, de Claudio Soza y de Pilar Pérez". Según la fuente, estas diligencias y otras que se hicieron resultaron infructuosas.
"Un Error"
En la fiscalía se señaló que "nos dimos cuenta que sólo a raíz del crimen de Diego se pudo develar la compleja telaraña que había tejido María del Pilar con Ruz (...). Efectivamente, los antecedentes que teníamos nos pudieron conducir a un error que nos vinculaba con Claudio Soza y no a María del Pilar".
Mientras la causa contra Claudio Soza, quien es primo de una de las víctimas, continuaba su curso, el verdadero autor de los homicidios, José Mario Ruz, planeaba un nuevo ataque. Pilar Pérez le había ofrecido $ 40 millones por eliminar a toda la familia de su hermana Gloria, incluida su madre.
La serie de homicidios debía realizarse el 4 de noviembre, pero alguien se interpuso: Diego Schmidt-Hebbel, recién egresado de Economía y jugador de fútbol americano, intentó defender a su polola María Belén del atacante, que empuñaba una pistola y que a toda costa intentaba entrar a su casa. El joven murió de un tiro en el cuello luego de forcejear con Ruz.
"Mucha gente nos pregunta, si se hubiese indagado correctamente probablemente no habría pasado lo de Diego. No lo sabemos", dijo un personero de la fiscalía a cargo de la investigación que, además, reconoció que la "confesión" del único imputado en el doble homicidio, "no se corresponde con los hechos".
[8 de diciembre de 2008]
[©la tercera]
06 diciembre 2008
Sobreseerán a Claudio Soza

La fiscalía de Ñuñoa anunció anoche que solicitó una audiencia para sobreseer a Claudio Soza (79), hasta ahora el único imputado por el crimen de Francisco Zamorano y Héctor Arévalo, ocurrido el 23 de abril pasado en Providencia.
La petición se originó luego de que José Ruz -el sicario imputado por el crimen de Diego Schmidt-Hebbel- confesara el miércoles la autoría del doble homicidio, asegurando que éste le fue encargado por María del Pilar Pérez, ex esposa de Zamorano.
De acuerdo con la declaración de Ruz, y ante las pruebas que recabaron los fiscales Vinko Fodich y Carlos Gajardo en contra de éste, se descartó la participación de Soza en el doble homicidio, por lo que la fiscalía tomó la decisión de sobreseerlo.
Protección Policial
"María del Pilar me ha mandado a amenazar con terceros adentro de la cárcel. Me mandan papeles de que si hablo me van a mandar a matar a mi familia". Esta fue la advertencia que, en sus dos últimas declaraciones, José Ruz hizo presente a la Fiscalía de Ñuñoa, mostrándose preocupado por su integridad y la de su mujer, Angélica. Por ello pidió protección.
Ruz dijo temer algún tipo de represalia de parte de María del Pilar Pérez, quien -asegura- le encargó el asesinato de su ex esposo Francisco Zamorano y de Héctor Arévalo (ocurrido el 23 de abril), además de la muerte de su cuñado, Agustín Molina, y toda su familia, lo que finalmente derivó en el crimen de Diego Schmidt-Hebbel.
Es por ello que el Ministerio Público accedió a la petición de Ruz y ordenó protección policial para su mujer y su familia. Esta se traducirá, por ahora, en rondas periódicas de carabineros del sector a la casa de Ruz, donde actualmente vive su mujer, en La Florida.
Ante las pruebas, José Ruz confesó que María del Pilar Pérez le ofreció $ 2 millones por cometer el doble asesinato y narró detalladamente cómo cometió el hecho ocurrido en el segundo piso de calle Infante 1020, en Providencia.
Mientras, el martes se realizará una audiencia en que la defensa de Ruz solicitará anular la confesión de él, ya que al realizarla estaba sin su abogado, Gonzalo Castro. El defensor de la mujer de Ruz, Octavio Sufán, también pidió una audiencia para que la fiscalía esclarezca la situación legal en que está la esposa del detenido.
[Consuelo Argandoña]
[6 de diciembre de 2008]
[©la tercera]
05 diciembre 2008
Hallan Plano de Crimen de la Quintrala

La supuesta confesión del sicario José Ruz en el asesinato del esposo de la mujer habría sido tomada bajo presión y amenazas según indicó el mismo imputado, quien se encuentra nervioso y bajo un cuadro depresivo hospitalizado en Santiago Uno.
Un importante hallazgo realizó hace algunos días la Fiscalía Oriente. El famoso plano de la casa ubicada en Seminario 97 y que fue mencionado por el sicario José Ruz Rodríguez en su segunda declaración ante el Ministerio Público fue encontrado en el propio domicilio del imputado, ubicado en la comuna de La Florida.
El detallado mapa habría sido confeccionado por la arquitecta María del Pilar Pérez -imputada en el homicidio de Diego Schmidt-Hebbel ocurrido el 4 de noviembre pasado- y se ha transformado en una de las pruebas esenciales para sindicar a la mujer como la autora inductora de este macabro asesinato.
El bosquejo sería de gran calidad, por lo que no caben dudas de que la mujer utilizó sus herramientas profesionales para elaborarlo.
Por ello, las pesquisas se centrarán en incautar la impresora profesional con la que elaboró dicho plano y en la que quizás urdió otros crímenes, dijeron fuentes cercanas a la indagatoria.
Esto último porque Ruz habría confesado este miércoles que además de haber sido contratado para matar a Agustín Molina, cuñado de la mujer, antes había realizado otro ‘trabajo' para Pérez por $3 millones.
El imputado se refería a la ejecución del arquitecto Francisco Zamorano (ex esposo de la mujer) y su pareja Héctor Arévalo, ocurrida en abril pasado.
Al respecto, el fiscal Carlos Gajardo fue tajante en señalar que tras varias pistas surgidas en los últimos días, que se complementan con la declaración de Ruz, lograron determinar que existen antecedentes concretos que vinculan ambas indagatorias que ayer fueron agrupadas.
Ilegal
Pero Ruz declaró sin la presencia de su defensor Gonzalo Castro y ésta habría sido bajo presión y amenazas, según le manifestó ayer el imputado a su abogado.
Durante el interrogatorio se habría deslizado la posibilidad de abrir causas criminales en contra de su familia si él no cooperaba, pues ésta estaría ocultando evidencia como el plano presuntamente elaborado por ‘la Quintrala' y el arma utilizada en el crimen de Seminario 97, comentó el profesional.
De hecho, Castro ayer presentó un escrito ante el Octavo Juzgado de Garantía para resguardar el derecho a defensa de Ruz y solicitar que se anule la revelación hecha por su cliente.
"Cualquier persona privada de libertad y que es interrogada con la extensión que se hizo va a confesar bajo presión. En todas las entrevistas que tuve con José Ruz, jamás me dio un indicio de su participación en ese crimen. Jamás me lo dijo", señaló Castro.
Tráfico de Llamadas
Se espera que la próxima semana la Fiscalía reformalice a Ruz por el doble homicidio. Ahora trabaja para reunir la mayor cantidad de evidencia posible.
Hasta el momento, las pistas surgidas giran en torno a la compra del arma homicida y el tráfico de llamadas entre el celular de la mujer y el que la misma le entregó a Ruz para coordinar los encargos.
Luego de que el Ministerio Público analizara este registro hubo ciertas reveladoras coincidencias, como que luego del crimen de Schmidt-Hebbel el sicario se comunicó con Pérez para informarle que había errado en el objetivo.
Asimismo, consta otra sospechosa llamada que data del 24 de abril pasadas las cuatro de la tarde (horas después del doble asesinato en Infante), cuando Ruz la llamó para contarle el éxito del trabajo que ella le encargó.
Por este motivo, se solicitará a las empresas de telefonía ampliar este registro a todas las llamadas entre el celular de ambos imputados realizadas durante todo el 2008.
El Dolor de Pilar Pérez
Ayer, María del Pilar Pérez fue trasladada hasta la Fiscalía de Ñuñoa, donde volvió a reiterar su negativa a declarar. Pero esta vez fue distinto. La mujer se mostró acongojada por las nuevas imputaciones, sobre todo al conocer que su hija Rocío Zamorano Pérez estudia querellarse en su contra por el asesinato de su padre.
El abogado Francisco Cox, quien representa a los hijos del matrimonio Zamorano Pérez señaló ayer en el Centro de Justicia que "ella (Rocío) está evaluando y se tomará todo el tiempo que necesite para ver si presenta una acción legal en contra del señor (José) Ruz y, eventualmente, contra su madre".
[5 de diciembre de 2008]
[©la nación]
04 diciembre 2008
Ruz También Mató en Providencia
[Santiago] Homicida de economista habría confesado autoría de doble crimen en Providencia. José Ruz habría declarado esto al fiscal a cargo del caso -ocurrido en abril pasado-, en el que una de las víctimas era el ex esposo de María del Carmen Pérez.
El homicida del joven economista Diego Schmidt-Hebbel habría confesado ser el autor -enviado por María del Pilar Pérez- del doble crimen ocurrido ocho meses atrás.
Según informó Canal 13, José Ruz habría declarado la autoría del asesinato de la pareja Héctor Arévalo y Francisco Zamorano, este último ex marido de ‘La Quintrala', al fiscal Carlos Gajardo.
El interrogatorio se produjo durante varias horas, desde la tarde de ayer, y habría culminado con la confesión de Ruz, a quien se le había encomendado matar a Agustín Molina, padre de Belén, novia de Schmidt-Hebbel.
Si bien, los efectivos policiales tenían indicios de los hechos, la declaración de hecha por Ruz -que permanece en Colina I- disiparía las dudas.
[4 de diciembre de 2008]
[©emol]
El homicida del joven economista Diego Schmidt-Hebbel habría confesado ser el autor -enviado por María del Pilar Pérez- del doble crimen ocurrido ocho meses atrás.
Según informó Canal 13, José Ruz habría declarado la autoría del asesinato de la pareja Héctor Arévalo y Francisco Zamorano, este último ex marido de ‘La Quintrala', al fiscal Carlos Gajardo.
El interrogatorio se produjo durante varias horas, desde la tarde de ayer, y habría culminado con la confesión de Ruz, a quien se le había encomendado matar a Agustín Molina, padre de Belén, novia de Schmidt-Hebbel.
Si bien, los efectivos policiales tenían indicios de los hechos, la declaración de hecha por Ruz -que permanece en Colina I- disiparía las dudas.
[4 de diciembre de 2008]
[©emol]
23 noviembre 2008
Inéditos sobre el Crimen de Calle Seminario

El pasado martes 4 de noviembre fue un día negro para la familia de Diego Schmidt-Hebbel Nehus, el joven universitario que fue asesinado en la puerta de la casa de su polola, María Belén Molina, cuando un sujeto intentaba ingresar para robar en el inmueble.
Todo pasó muy rápido, ya que la Policía de Investigaciones detuvo esa misma noche al homicida, identificado como José Mario Ruz Rodríguez, de 44 años, quien confesó de inmediato el delito, pidiéndole perdón a la familia del joven y a su mujer.
Los Relatos
José Ruz (el asesino): "Ella (Pilar Pérez) me dijo que la niña salía a las 8 de la mañana de la casa. Incluso me hizo un dibujo, explicándome las distintas piezas y su distribución. Me dijo que la Nena vivía en el último dormitorio del tercer piso y que el matrimonio vivía en la pieza anterior. Que había tres dormitorios en el tercer piso. En el segundo piso me dijo que había una oficina del español donde tenía sus cosas y una caja de fondos. Me dijo que había plata en la caja".
Lunes 3 de noviembre, 07.30 horas, calle Seminario.
José Ruz: "Fui a la casa, estacioné el auto a la vuelta de Seminario. Andaba con la pistola, pero no fui capaz de bajarme. Me volví a mi casa, llegué como a las 9 (...) me llamó por teléfono (Pilar), yo le dije que no llegaron las otras personas para hacer el trabajo, porque iba a haber más personas para hacer el trabajo".
Martes 4 de noviembre, 06.00 horas, casa de Ruz en La Florida.
José Ruz: "Me levanté a las 06.00 de la mañana. Me vestí con jeans, un gorro y con lentes (...) me puse la chaqueta estilo militar".
07.45 horas, calle Seminario
María Belén, polola de Diego: "Tocaron el timbre, llegó Diego (...). En ese momento un sujeto que se encontraba detrás, empuja a Diego con la finalidad de poder entrar, provocándose un forcejeo. Diego intentó protegerme, trataba de sacarlo de la casa, pero el sujeto se resistía".
José Ruz: "Me estacioné y me bajé. Llevaba la pistola en el banano color rojo y un bolso oscuro. Me puse frente a la casa por esa misma vereda. Llegó un joven alto, tocó el timbre y yo me puse al lado. Sonó el tac de la puerta y yo saqué la pistola del banano y cuando abrieron la puerta, los empujé hacia adentro. Ahí comenzó el forcejeo. Yo nunca hablé, él tampoco. La niña gritaba. La pistola estaba en mi mano y en el forcejeo se salieron dos tiros y uno le dio".
Agustín Molina, padre de María Belén: "A raíz de los gritos de mi hija, bajo la escalera con el objeto de ayudar. María Belén gritaba que estaban asaltando a Diego, momento en que escuchamos dos disparos. Veo a Diego en el suelo herido".
Gloria Ximena Pérez López, madre de María Belén: "El pololo de mi hija María Belén Molina tocó el citófono como todos los días. Mi hija bajó la escalera y en ese instante sentí gritos de ayuda".
Agustín Molina: "Mi hija no me dejaba salir pues me gritaba que este hombre me podía matar. Logro poner a un lado a mi hija y abro la puerta observando que el sujeto ya no estaba en el lugar, saliendo en su persecución, pese a que en ese momento me encontraba vestido con pijama corriendo tras éste por calle Seminario (...). A esa distancia pude escuchar los gritos desgarradores de mi hija, ante lo cual me devuelvo a casa".
P. A. (testigo): "Gritan: asesino, que lo detengan. Me bajo del auto, y veo a un tipo de 1.70 aproximadamente. Casaca camuflada de unos 50 años, pelo al rape que mostraba un arma en su chaqueta. Cruzó por Seminario, entró por Matte Pérez y se subió en el tercer auto estacionado, un Kia Pop Rojo. Mostraba manchas de sangre en el rostro, luego conduje al lugar del hecho a entregar la patente a Carabineros. En el lugar se encontraba un joven en el suelo con un impacto de bala en el cuello y todo ensangrentado".
José Ruz: "Me fui caminando muy rápido. Escuché que atrás gritaba el español. Me encontré con un sujeto que estaba en la vereda, le hice un movimiento con la mano como sacar una pistola y él se corrió. Me subí al auto y tiré el bolso al asiento de atrás".
C. D. (testigo): "Iba en dirección al norte por la calle Seminario cuando veo que hay un herido a bala en el suelo desangrándose, mientras que su polola gritaba desesperada que la ayudaran. Me acerqué a ella intentando ayudarla. Llamé a Carabineros y seguridad ciudadana. El herido estaba en el suelo hasta que llegó la ambulancia. Cuando estaba en el semáforo vi al hombre que disparó. No vi el arma ni nada por el estilo, solo lo vi de espalda. Era de estatura media, calvo, usaba jeans, una chaqueta de camuflaje y llevaba un bolso grande".
Vivian Schmidt-Hebbel Niehaus (hermana de Diego).
"Alrededor de las 07.50 horas, en circunstancias que me encontraba en dirección a la Universidad Católica en avenida Vicuña Mackenna, recibí un llamado vía teléfono celular de María Belén Molina, quien es la polola de mi hermano, indicándome que mi hermano había sufrido un robo y que había sido trasladado de urgencia a la Posta Central, por lo cual me trasladara en forma inmediata al centro asistencial. Una vez en el lugar me pude percatar de que mi hermano había sufrido un impacto de bala en su cuello, por lo que estaba internado de urgencia".
Casa de María del Pilar
Julio Castillo (mayordomo): "En la mañana sentí unos balazos y unos golpes en la puerta. Los perros ladraron. Me asomé por la ventana y veo a Diego lleno de sangre en el piso y veo a Belén que grita: Diego, despierta. Pilar se incorporó cuando la Belén gritaba. Abrí la ventana para poder asomarme y mirar bien. La Pilar también se asomó. Quedamos asombrados. Ella iba a bajar pero no bajó. Se fue a bañar y tomamos desayuno. Más tarde su hija Rocío la llamó para contarle de la muerte de Diego. De inmediato hizo unos cheques y me dijo que los fuera a pagar. Se fue a acostar y no quiso almorzar".
Casa de José Ruz en La Florida
José Ruz: "Llegué a mi casa, desarmé la pistola, lavé la ropa pero no quedó limpia. Las zapatillas las lavé también. El resto de la ropa la quemé con bencina y luego la boté. Me rasuré el pelo solo. Me fui al (café) Ikabaru tipo 11.15 horas en metro. De ahí me fui al Kournikova. Estuve ahí, me tomé un café, luego otro. No quería que me vieran llorando (...). Llamé a Pilar y le dije: quedó la cagá, llámame".
[Consuelo Argandoña]
[23 de noviembre de 2008]
[©la tercera]
16 noviembre 2008
"Yo No He Matado a Nadie"

"No tenía problemas de arriendo con Pelayo, ni tampoco soy ni he sido homofóbico. Doce años vivió Pelayo en el segundo piso de mi casa sin problemas". Así dice Claudio Soza Zamorano (75) que era la relación con su primo Francisco Zamorano Marfull, asesinado el 23 de abril pasado junto a su pareja, Héctor Arévalo, crimen por el cual está formalizado como autor material.
Encerrado en casa de su hija en Providencia, tras quedar en libertad previo pago de una fianza de $ 15 millones, Soza se refiere por primera vez al hecho y -a través de un cuestionario- aseguró a La Tercera que es "inocente".
Este caso volvió a salir a la luz luego que esta semana, en el marco de la investigación por el crimen del joven ingeniero Diego Schmidt-Hebbel, se revelara que un email anónimo enviado a la fiscalía en mayo pasado vinculó con el doble homicidio a María del Pilar Pérez López. Ella, quien está detenida como autora mediata por la muerte de Diego, es ex esposa de Zamorano.
"Soy inocente del doble homicidio", asegura categórico Soza y agrega: "Yo no he matado a nadie".
"No Confesé Nada"
Una de las principales pruebas de la Fiscalía de Ñuñoa en contra del imputado es su propia declaración ante efectivos de la Brigada de Homicidios de la Policía de Investigaciones, en la cual confiesa y detalla el crimen.
No obstante, horas después se retractó y aseveró: "No recuerdo bien si hice lo que conté". Ahora, Soza explica que "en mi primera declaración, yo no confesé nada. Fui interrogado como testigo(...) En la segunda declaración, no confesé nada. Mi firma está en declaración negando haber confesado y eso fue ante el fiscal de la causa".
Sobre María del Pilar, señala que "no la conocí. Dejé de ver a Pelayo al casarse, hasta cuando ya estaba separado [...] Ninguna relación con ella, prácticamente no la conocí".
Tampoco dice conocer a la familia de Agustín Molina, el padre de María Belén, polola de Diego. Según la investigación, Molina era el objetivo original de un ataque planeado por María del Pilar y que terminó con el economista muerto.
Ante estas declaraciones, una familiar de Francisco Zamorano respondió que "si él dice ser inocente, entonces ¿por qué nunca se acercó a conversar con nosotros? Es doloroso, pero hay que enfrentarlo. Nosotros nos basamos en lo que él (Soza) declaró".
Según la investigación de los fiscales Vinko Fodich y Carlos Gajardo, María del Pilar contrató a José Ruz ofreciéndole $ 30 millones para asesinar a su cuñado Agustín Molina.
Trascendió que en una de las confesiones de Ruz éste indicó que fue la mujer quien le dio las instrucciones precisas de dónde adquirir el arma para el homicidio, que derivó en la muerte de Diego cuando éste trató de impedir el ingreso de Ruz al hogar de Molina.
[Consuelo Argandoña]
[16 de noviembre de 2008]
[©la tercera]
El Crimen Que Quintrala Pérez No Cometió

Lucrecia Lara Garrido veía en María del Pilar y Carlos Rafael una pareja feliz. Llevaba cinco años trabajando como asesora del hogar en Seminario Nº 95 y nunca notó algo extraño, nada que indicara una separación ni menos, un intento de homicidio.
Tan ajena a la mente de su patrona estaba que el 6 de julio de 2002 no reparó en una sospechosa reunión que sostuvo la mujer con un inspector de la Municipalidad de Santiago en calle Santo Domingo, quien la acusaba de intentar asesinar a su conviviente.
Pocos días antes, en una fuente de soda de la Plaza de Armas, María del Pilar Pérez López dio instrucciones claras y precisas a William Martínez Salinas, un funcionario de la Dirección de Obras Municipales, para engañar a su conviviente, Carlos Rafael Felip Imperatore, y llevarlo al sector de El Noviciado para matarlo, sacarle la billetera y el reloj, y arrojarlo a la orilla del Río Mapocho.
Los detalles de esta tentativa de homicidio y por qué no terminó en condena, quedaron registrados en 2002, en el expediente 25329, del 17º Juzgado del Crimen que actualmente está guardado (desde el 2006), en el Archivo Judicial de Santiago con sobreseimiento temporal.
Recién el viernes, se había pedido una copia autorizada por parte de la fiscalía de Ñuñoa, según confirmó Xavier Armendáriz, jefe regional de la Fiscalía Metropolitana Oriente, y el desarchivo del mismo expediente, por parte del Cuarto Juzgado del Crimen, tribunal que tiene a su cargo el antiguo expediente y que estudiará su reapertura.
El proceso es breve, sólo cuenta con 169 hojas y nunca se dictó una encargatoria de reo pese a que la Brigada de Investigación Criminal de Providencia, que indagó la denuncia interpuesta por Carlos Rafael Felip Imperatore la presunta víctima , concluye algo muy distinto.
El entonces subcomisario José McLean y la subprefecto Cecilia Correa establecieron en un informe redactado el 19 de agosto, que "se acreditó la efectividad de la denuncia conforme las declaraciones insertas en el presente informe" y agregan que "no se descartó de total responsabilidad a la imputada de este delito".
El expediente no consigna la declaración de María del Pilar Pérez López ni tampoco todas las diligencias solicitadas en su momento por el abogado querellante Pablo Flores. Tal vez, la más importante que pudo influir para evitar las acciones futuras que, entre otras posibles, terminaron hace dos semanas con la vida del ingeniero comercial Diego Schmidt-Hebbel, fue una serie de exámenes sicológicos y psiquiátricos que fueron solicitados al tribunal pero que nunca fueron ordenados por Patricia González, titular del juzgado.
El expediente confirma que fue el mismo William Martínez el supuesto sicario quien advirtió a Felip Imperatore de los planes de su mujer.
El 12 de julio de 2002, Martínez declaró que los primeros días de ese mes, en una fuente de soda, cercana a la Plaza de Armas, "me manifestó que deseaba eliminar a una persona y que había que matarlo y echarlo al Río Mapocho, por el sector de El Noviciado manifestándome, en ese momento, que era su esposo y diciéndome, además, que debíamos hacerlo entre los dos. Yo respondí que lo haría solo. La prueba sería que yo le llevaría la billetera y chequera, puesto que ella podía vender los cheques. En un principio no quería que fuera solo, pero después a aceptó".
Tanto en la declaración como en el posterior careo al que fueron sometidos éste y la mujer, sostiene que ella le ofreció 2 millones de pesos y una camioneta para cometer el crimen. Sin embargo, nunca se acreditó que existiera algún pago.
El tribunal tampoco pidió información sobre los movimientos financieros de María del Pilar ni de Martínez.
La Confesión
Las dudas y preocupaciones cayeron encima al empleado que dice haber decidido contarle lo sucedido a la presunta víctima.
"Ese mismo día a las 17 horas llamé a un Carlos Felip Imperatore manifestándole que debíamos juntarnos para ver un trabajo en el sector de El Noviciado.
Este me pasó a buscar en su camioneta. Cuando nos dirigíamos por el camino me sentía muy incómodo y no encontraba la forma de contar lo ocurrido por lo que cuando íbamos por Vespucio le conté, es decir, le relaté todo lo que me había dicho su mujer y que por favor no regresara a su casa dejándome a mí en el estacionamiento en el que dejé mi vehículo y retirándose", le explicó al tribunal.
La declaración que hizo el funcionario municipal es casi calcada a la de Felip Imperatore, quien detalla el encuentro que sostuvo con William Martínez, el momento en que le confiesa los planes que tenía su mujer y los pormenores de los mismos.
Tras juntarse en Catedral con San Martín, en el centro de Santiago, en la camioneta de Felip se dirigen hasta Américo Vespucio con Lo Echevers. Tras detenerse en la berma, bajan del vehículo y le cuenta del encuentro con su pareja en la fuente de soda.
"En ese lugar ella le indicó que yo le había hecho algo terrible y que debía grandes cantidades de dinero y quería que él me matara. Le ofreció $2.000.000 y le explicó un plan que él debía seguir para hacerlo. La idea era tirarme al Río Mapocho, muerto, en el sector de El Noviciado, a donde me llevaría con la excusa de un trabajo. Mi señora le pidió a William que me quitara la billetera y la chequera porque ella podía vender los cheques. La camioneta debía abandonarla en algún lugar lejano. Le recomendó usar guantes quirúrgicos", cuenta Felip.
La posible planificación del crimen queda de manifiesto, según Felip, debido a que estando informada de que su pareja iría a El Noviciado junto a William Martínez, al pasar las horas, comenzó a llamar a amigos y a la madre de su pareja diciendo que él no había llegado y que andaba en un asunto muy distinto.
Felip declaró que "llamé a mi madre para informarle y me contó que a las 19:30 horas había hablado telefónicamente con mi señora quien le había informado que yo estaba fuera entregando unos programas de software que vendo y cobrando unas facturas que me habían avisado estaban listas. En ningún momento mencionó a William Martínez o El Noviciado. Permanecí en la casa de mi hermana aproximadamente hasta la una, esperando comunicarme con mi sobrino, Patricio Martínez, abogado que reside en Antofagasta. Durante ese período mi señora se comunicó con varios amigos contándoles que yo no había llegado y a algunos les indicó lo mismo que le había contado a mi madre".
Tras recibir asesoría legal de su sobrino, Felip decidió acudir a Carabineros de la 19ª Comisaría de Providencia para estampar la denuncia el 11 de julio. Más tarde, acompañado por carabineros fue a Seminario Nº 95 a retirar sus cosas: "Mi señora abrió la puerta y apenas me vio me dijo que cómo podía contar eso de ella, antes que yo le explicara y me seguía a todos los rincones de la casa mientras sacaba mis cosas, asegurándome que me quería mucho y cuidando que no tomara nada que no fuera de ella".
Tres horas más tarde lo llamó para explicarle que todo era un malentendido: "Me aseguró que mi madre y todas las otras personas le habían entendido mal y que lo que había dicho era que yo había salido a dejar tres programas y cobrar unas facturas".
[Luis Narváez]
[16 de noviembre de 2008]
[©la nación]
15 noviembre 2008
Odios y Amores de Quintrala Pérez

Era un rito entre ambas. La arquitecta María del Pilar Pérez López (56 años) llamaba por teléfono a su hija mayor, Rocío Zamorano, cuando corrían los primeros minutos del día de su cumpleaños. Pero el pasado jueves 6 de noviembre no lo hizo.
La joven se extrañó, pese a que la celebración de sus 30 años no tendría nada de festiva. Toda su familia estaba bajo la impresión de la muerte de Diego Schimidt-Hebbel, el pololo de su prima María Belén Molina Pérez. El día anterior, un desconocido le había disparado cuando Diego forcejeó con él para impedirle la entrada a la casa de los Molina Pérez, supuestamente para robar.
Pero, al margen de la tragedia todavía fresca, Rocío sabía que no podía descuidar a su madre, siempre al borde del colapso depresivo. A primera hora fue a verla a su casa y la encontró profundamente dormida, bajo los efectos de tranquilizantes. "Mi mamá ya está de nuevo con la tontera", comentó. A esa hora, no tenía cómo saber que la mujer había ingerido una sobredosis de calmantes y que sería detenida a las 23.10 horas por su participación en el homicidio de Diego.
Ahora, ella y su familia se están enterando de indicios y detalles que apenas pueden soportar.
Además, desde el lunes 10, María del Pilar Pérez López está siendo investigada por homicidio frustrado en contra de su cuñado Agustín Molina, casado con su hermana Gloria, el verdadero objeto de su odio. "Déjalo inválido, muy mal o hecho bolsa", le habría indicado a Mario Ruz, el hombre que aseguró que ella lo había contratado para eliminar a Molina, y que terminó asesinando a Diego Schmidt-Hebbel. Por este crimen también tendrá que responder, en calidad de autora intelectual de homicidio consumado.
El jueves 13, la mujer fue trasladada desde el hospital de la Penitenciaría hasta el Centro Penitenciario Femenino, donde cumple prisión preventiva.
Hasta ahora, era ‘La Pocha' para sus familiares. Acelerada, siempre con una bolsa de tejido a crochet a la mano, divertida y buena para echar garabatos. Hasta que diversos dolores, quiebres y frustraciones gatillaron un cambio irreparable en ella.
2 Caras
María del Pilar Pérez es la hija mayor y predilecta de José Pérez Pérez, un emigrado oriundo de Galicia que llegó a Chile en los años 40 desde Argentina. Pérez instaló una panadería en la esquina de Seminario con Rancagua, la cual funcionó hasta 2001, dos años después de su muerte.
Desde niña, la arquitecta fue muy unida con sus hermanas menores: Magdalena (54), médico obstetra, y Gloria (51), dueña de casa. Las tres estudiaron en el Colegio Mariano de Schöenstatt. Existía la sensación de que el padre era muy estricto y que las niñas le temían.
María del Pilar, líder entre sus hermanas, llegaba a clases de punta en blanco, con sus útiles escolares en perfecto orden. Antes que agresiva, parecía tímida.
La misma impresión dejó entre sus compañeros de Arquitectura en la Universidad Católica, donde ingresó en 1971. "Era bonita, seria, muy formal. Destacaba porque se vestía muy bien, entre todos los demás que andábamos bien hippientos", comenta un ex compañero.
No hay recuerdo universitario sobre María del Pilar Pérez que no la asocie con su eterno pololo: Francisco Zamorano, quien sería después su marido por 15 años, padre de sus hijos Rocío (30) y Juan José (27), y una de las peores sospechas que ronda acerca de la mujer. Que el tiro en la cabeza que recibió, junto a su pareja Héctor Arévalo, en abril de 2008, también haya sido ordenado por ella.
El Primer Dolor
Son los primeros años de los '80 y Pilar siente que su vida está hecha: en 1976 se casó con Zamorano, en 1978 se tituló de arquitecta y ya tiene a sus pequeños Rocío y Juan José. Con su marido remodelaron la casa de Seminario 95, a gusto de arquitecto, con un gran dormitorio principal que tiene una pared completamente cubierta de espejos y un baño oculto tras ellos.
Hasta entonces, todo iba bien con ella, pero su grato aspecto empezaba a mostrar trizaduras. "Iba de arrogante por la vida y, generalmente, roteaba a la gente", señala una hermana de Francisco Zamorano, que desconoció por años el largo pololeo que sostuvieron.
La arquitecta trabajó desde siempre en su profesión. "No era de grandes obras o de proyectos nuevos, sino más bien de remodelaciones", explica un ingeniero que colaboró con ella durante siete años. En los últimos años se dedicó a la refacción de moteles y cafés con piernas.
Pese a que sus colaboradores pasaban mucho tiempo con ella, poco sabían de su vida privada. No se enteraron, por ejemplo, de su separación de Zamorano, en 1991. Ni menos de las razones. Eso se lo guardó.
El dolor lo hizo visible cuando su marido -del que no se divorció- fue asesinado este año junto a Arévalo: al funeral no pudo ir, pues sabía que los Zamorano no la querían. En su ausencia, su ex marido fue sepultado en el mausoleo de los Pérez, en el Cementerio General, diseñado por ambos en los tiempos felices. Días después sufrió un ataque de llanto frente a la cripta.
Pero María del Pilar ya había hecho crisis nueve años antes, cuando perdió a uno de los hombres más importantes de su vida: su padre, quien la nombró heredera de, al menos, el 60% de sus propiedades.
En 1999, después de un largo padecimiento del mal de Alzheimer, José Pérez Pérez murió en casa de los Molina. Su fallecimiento coronó la serie de disputas por temas financieros que mantenían su esposa, sus tres hijas y su cuñado, Agustín. El y María del Pilar, como hermana mayor, rivalizaban hacía un tiempo por la conducción del pequeño imperio inmobiliario que José Pérez había formado en calle Seminario, compuesto por una veintena de propiedades. Entre ellas, la panadería.
Los vecinos comentan que a la arquitecta no se le permitió visitar a su padre enfermo. Algo que nunca le perdonó a Agustín y Gloria. Rafael Felip, la pareja que tuvo después de separarse de Zamorano, declaró ante la fiscalía de Ñuñoa que "nos dimos cuenta que (...) los cuidados no eran de enfermeros profesionales, que lo estaban matando de hambre y por eso tuvimos fuertes peleas con su madre y con su hermana (Gloria)".
Según cercanos a la familia, la arquitecta despreciaba el origen humilde de su cuñado, quien se mudó desde su España natal después de conocer y enamorarse de Gloria durante un viaje de ésta. Se casaron en 1979. "Don José le dio trabajo y, de a poco, empezó a tomar un fuerte rol en los negocios. Ahí empezaron los problemas", dice un vecino.
La relación familiar entre las hermanas se quebró el 2000. Pese a todo, María del Pilar y Gloria siguieron siendo vecinas en el inmueble compuesto por la panadería y dos casas-departamento: la primera en Seminario 95 y la segunda, en el número 97 con su familia y la madre de ambas, Aurelia López, quien hace años que no sale de la casa.
Los hijos de ambas, que siempre han sido amigos, no han dejado de verse. Esta semana se juntaron para ratificar su intención de permanecer unidos pese a todo. De hecho, Diego Schmidt-Hebbel, pololo de María Belén Molina, conocía a Juan José.
La Debacle
Desde 2002 en adelante, la vida de María del Pilar Pérez es una sucesión de conflictos, quiebres y dramas. Ese año se desarrolla la ruptura amorosa más conflictiva de su expediente personal. Su pareja de entonces, el arquitecto Rafael Felip, interpuso una querella ante el 17 Juzgado del Crimen por intento de asesinato. Alegó que la mujer había contratado a Williams Martínez, un conocido de ambos, para que lo asesinara por $ 2 millones y que éste se lo había confesado todo.
Ese mismo día, el 6 de julio de 2002, Felip abandonó a Pilar. "Alrededor de la 1.45 de la mañana llegó Carabineros junto a mi ex pareja explicándome que (éste) había dejado constancia en la unidad para retirar sus efectos personales y hacer abandono de hogar. (...) Deseo acreditar que todo esto es un invento y lo acreditaré con documentación y pruebas", declaró Pérez en la causa que el 2005 fue sobreseída.
La espiral de desencuentros continuó. En 2005, su hija Rocío Zamorano pidió hora en dos oficinas del Registro Civil para evitar que su madre interrumpiera su matrimonio con Rodrigo Arroyo, a quien ella no aprobaba.
En 2007 vendría otro quiebre doloroso. Su hijo Juan José también se casó sin su consentimiento, y a comienzos de año rompió relaciones con ella después de que ésta empujara por las escaleras a su esposa, Monserrat Hernando. Según los vecinos, ya había usado el método de las escaleras con su propia madre, para finalizar una violenta discusión poco antes de que muriera su padre.
La ruptura con Juan José fue tan definitiva que el joven no vaciló en declarar contra su madre al inicio de la investigación por el crimen de Diego Schmidt-Hebbel, comentando lo que había ocurrido con su esposa. Por esta causa, la arquitecta será formalizada el lunes por homicidio frustrado.
Perder a su hijo, después de su padre, la sumió en una depresión profunda, que combatía con medicamentos. Nada, sin embargo, atemperaba su mala relación con Agustín Molina, especialmente después del acuerdo extrajudicial que redistribuyó la herencia paterna y lo dejó a él en mejor posición. María del Pilar Pérez adelgazaba a ojos vista, a puro dolor y odio. Este invierno, una vecina le recomendó que tomara suplemento alimenticio, porque "estaba pesando como 30 kilos, flaca, flaca".
El desenlace de su historia se produjo, sin embargo, de la manera más violenta, cuando Mario Ruz, supuestamente cumpliendo sus órdenes, asesinó por equivocación a un ingeniero joven y prometedor. El jueves 6 de noviembre fue detenida en su casa de Seminario 95. Estaba inconsciente y acompañada de Julio Castillo, su pareja desde 2004. A los pies de la cama, Baltazar y Cleopatra, sus perros.
Ayer recibió su primera visita en la cárcel. Por cerca de una hora, la imputada estuvo con un familiar cercano, quien le llevó ropa y sus lentes para leer. Vio su cara en televisión y hojeó los diarios. Leyó su sobrenombre de ‘Quintrala' en la prensa y se manifestó "sentida" por los comentarios de algunas personas que la conocen, como el cantante Luis Dimas, quien le arrienda un departamento. Su carácter afloró de inmediato y pidió a sus representantes que le pidan el departamento al artista.
En estos días de encierro, María del Pilar ha alegado inocencia, se ha sentido abandonada y ha dicho que es su familia la que la quiere perjudicar. Para ella, la batalla continúa.
[Consuelo Argandoña , Claudia Urzúa y Jacmel Cuevas]
[15 de noviembre de 2008]
[©la tercera]
Quintrala Pérez Tiene Más Cómplices

Padre de la novia de Diego Schmidt-Hebbel afirma que la autora intelectual del crimen no podía saber todo lo que había o sucedía en su casa, por lo cual sospecha que hay otros involucrados.
La familia de Agustín Molina, quien era el objetivo original del ataque que terminó con la vida del joven Diego Schmidt-Hebbel, presentó una querella contra los imputados del caso, María del Pilar Pérez y José Ruz Rodríguez.
La acción judicial es por los delitos de robo con homicidio frustrado, en perjuicio de Agustín Molina, y de robo con homicidio consumado en la persona del joven economista y pololo de María Belén Molina.
El abogado de Molina, José Pérez Calaf, dijo que la querella busca establecer exactamente cuándo y como se gestó el plan para matar a Molina. También se fundamenta en el afecto que tenía la familia con la víctima.
"El pololo era casi un hijo para ellos y siempre lo fue, un chico que pasaba cuatro o cinco días de la semana en la casa de ellos, por lo tanto cuando ocurre este hecho también se destruye la convivencia que había, esa paz que había", indicó Pérez Calaf.
Agustín Molina, cuñado de María del Pilar Pérez, era el blanco que quería eliminar la imputada.
El abogado recalcó que la querella les permite ser parte del proceso y acceder a una serie de diligencias e información para entender cómo se logró todo el plan que llevó a la muerte de Schmitd-Hebbel.
"Queremos precisar bien quién pudo entregarle (a José Ruz) toda la información de los movimientos de la casa de don Agustín, internos y externos, porque ella (María del Pilar Pérez) no podía conocer todo lo que sucedía o había en la casa", dijo el abogado.
La querella de Agustín Molina, que se suma a la de Klaus Schmidt-Hebbel, padre del joven asesinado, fue presentada en el Octavo Juzgado de Garantía de Santiago, mediante correo electrónico.
Pérez Calaf añadió que "lo importante de esto es que nos permite hacernos parte, solicitar diligencias y tener acceso a la información. Por ahora le pedimos al fiscal que haga un empadronamiento de la gente de la zona y de aquellos que pueden tener contacto y vinculaciones con la imputada".
El abogado agregó que no ha podido tener acceso a la carpeta investigativa porque los fiscales Carlos Gajardo y Vinko Fodich decretaron secreto de la investigación durante 40 días, por lo que los abogados querellantes y los defensores de los imputados no están habilitados para acceder a la carpeta investigativa.
Respecto de una demanda civil, Pérez Calaf dijo que ese tema "no es lo que motiva hoy a don Agustín. Lo que él pretende es colaborar en la investigación y en su momento solicitar el máximo de pena, que es lo mismo que ha dicho el Ministerio Público, o sea presidio perpetuo calificado (un mínimo de 40 años)".
María del Pilar Pérez López, la mujer acusada de planificar el crimen que terminó con la muerte del joven economista Diego Schmidt-Hebbel, será formalizada la próxima semana, por la golpiza que le propinó a su nuera el año pasado, porque se oponía a la relación que ésta tenía con su hijo.
Nuevo Cargo
El nuevo cargo que deberá enfrentar ‘La Quintrala' es por homicidio frustrado en la persona de Montserrat H. B., esposa de Juan José Zamorano. La afectada declaró el jueves en la Fiscalía de Ñuñoa, en tanto que el hijo de María del Pilar Pérez testificó en la primera audiencia de formalización.
En esa oportunidad, Juan José Zamorano señaló que "cuando le dije a mi madre que tenía la intención de casarme con Montserrat, me puso problemas, que no debía casarme por mi corta edad. Esto provocó el incidente ese día".
"En el momento en que mi novia se retiraba de la casa -agregó- es empujada por la espalda desde el segundo piso, cayendo al primero por la escalera. Quedó golpeada y sin orientación. Mi novia, sin saber lo sucedido y pensando que mi madre se había resbalado y (la había) pasado a llevar, intentó levantarse cuando (ella) le propinó golpes de pies y puños en distintas partes del cuerpo y con un objeto contundente en la cabeza, mientras los perros la mordían. Finalmente, logró escapar".
[15 de noviembre de 2008]
[©la nación]
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