13 julio 2007

ladrones profanan cementerio

[Talcahuano] Camposanto de Talcahuano es profanado por bizarros ladrones. Macabro robo a muertos.
Pandilla de delincuentes, que en la tarde se envalentona, de noche ingresa al Cementerio 2 de Talcahuano a robar cobre, bronce y aluminio, entre otros ‘metales preciosos'.
"Fui a dejarle flores a mi madre y la mesa que está al lado de donde ella descansa estaba abierta y se veía el ataúd medio abierto... Fue terrible". La porteña, Gloria Vallejos, relató con rabia la grosera situación que afecta al Cementerio 2 de Talcahuano.
-¿Pero cómo tanto?
"Claro. Son constantes los robos. Yo voy una vez a la semana al camposanto y cada vez que bajo del auto me preocupo por el estado en el que pueda estar la mesa de mi madre".
La señora Gloria incluso ha conversado con otros deudos; uno de ellos le contó que "a él le robaron hasta las rejillas del nicho que tenía y la foto de su mamá que tenía ahí se la botaron lejos. Fue muy feo", comentó la porteña.

Metales Preciosos
Fue hace un año -cuando murió su mamá- que Gloria empezó a ir al cementerio 2. Ahí vio cómo dejan el camposanto los sujetos que entran en la noche a robar el cobre, bronce y aluminio de los últimos hogares terrenales de la inerte población.
Según testigos, los macabros delitos son cometidos por individuos de las inmediaciones, que en algunos casos se toman hasta su vituperio entre las tumbas; y luego, el material que sustraen lo venden.

Hay un Plan
El alcalde de Talcahuano, Abel Contreras, comentó estar al tanto de la situación. Detalló que para detener a los bizarros malhechores hay operativos funcionando de parte de las policías de color y verde.
"La meta que nos pusimos es acabar con la raíz de esto. Es decir, las personas que compran el material sustraído... Y esto nos ha dado resultados satisfactorios", comentó el edil.
Contreras aseguró que uno de los puntos que le juegan en contra a los guardias que trabajan de noche -momento de los delitos- es la gran superficie del cementerio.
Una de las medidas que tomó el municipio -contó el alcalde Abel Contreras- es redoblar la vigilancia. "Pero, a veces, para los guardias es difícil. Estos se han visto frente a pandillas de 20 individuos que entran al lugar, y frente a ello la situación es difícil para cualquiera", detalló el edil. El alcalde comentó que en estos casos se llama de inmediato a Carabineros -un guardia, por ley, no usa armas- y ellos responden de acuerdo a la contingencia que los afecte.
[Gustavo Aracena]
[cronica@cronica.cl]
[13 de julio de 2007]

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