18 marzo 2007

carabineros fiscalizan prostíbulos

[Calama] Carabineros fiscaliza prostíbulos en el radio urbano. No han hallado ventas clandestinas de alcoholes. Severa fiscalización de las casas en cuyo interior es ejercida la prostitución realiza Carabineros de la Provincia El Loa con el fin de prevenir que en esas prácticas involucren a menores de edad, que se conviertan en locales de venta clandestina de bebidas alcohólicas o que las personas en ejercicio no cuenten con la documentación sanitaria correspondiente.
En los casos más recientes de esa fiscalización que deriva de denuncias vecinales en cuanto a que se trata de negocios clandestinos de alcoholes, los efectivos policiales no hallaron ninguna evidencia que les permitiera deducir que había clandestinaje en venta de alcoholes. En el lugar se entrevistaron con la dueña del prostíbulo, con las asiladas y sus clientes, fijaron fotografías y todo estaba dentro de los rangos de la normalidad, es decir no había venta clandestina de alcoholes, ni menores de edad, ni falta de control sanitario y, como se sabe, en Chile la prostitución no es delito.
Carabineros continuará con esas acciones a fin de garantizar la tranquilidad pública y particularmente de los vecinos denunciantes.
En Calama se desconoce el número de mujeres que están ejerciendo la prostitución en lugares reconocidos y menos entre quienes realizan sus actividades en forma privada o sus propios domicilios, pero, actualmente, las personas que son dueñas de los prostíbulos hacen propaganda usando la mayor cantidad de medios de los que disponen hasta haber popularizado la distribución de volantes en la vía pública.

Naturalidad
Sólo los carabineros realizan fiscalización de ese tipo de actividades, deteniendo a quienes no tienen el carnet sanitario o a las que usan la vía pública para captar clientes, especialmente en horarios nocturnos.
La comunidad en general no hace gran cuestión por esa actividad conocida como el primer oficio y siempre se refieren a su ejercicio únicamente respecto de las mujeres, mientras que la realidad hace aparecer esa existencia como un reclamo de los hombres, al punto que explican que en una localidad minera como Calama la prostitución es un mal necesario. No se toma tan en cuenta la acción masculina que conduce a las mujeres a ese ejercicio, como se lo pregunta una poetisa si merece la mayor condena "la que peca por la paga o el que paga por pecar".
Precisamente es la naturalidad con la que es mirada la prostitución, la que oculta la otra cara de la moneda y hace aparecer la realidad sesgada, ya que siempre está la mirada únicamente sobre las proveedoras del sexo.
Precisamente, todas las medidas para erradicar, controlar o legalizar el llamado mal necesario apuntan únicamente a las mujeres las que deben contar con el documento sanitario, previo fichaje, sin que se sepa de sugerencia de alguna acción contraria a los que exigen ese mercado, explotan a las mujeres o hasta las violentan.
Los actuales convencimientos han llevado a muchas mujeres a considerar la prostitución como una opción laboral y ésta es una realidad aunque pueda decirse que hay muchas formas de ganarse la vida.
En la actualidad parece mayor el número de ellas que entran al negocio en forma totalmente consciente, pero con la alegación de que no tienen otra opción para contar con los medios adecuados para satisfacer sus necesidades materiales. Y ante realidad surgen los individuos que están atentos a facilitarles el camino y a explotarlas.
[18 de marzo de 2007]
mercurio de calama]

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