macabro plan

[Manuel Vega O.] Contrató a tres sicarios para matar a parientes y cobrar herencia. Delincuentes llegaron a parcela de Melipilla con placas de detectives. Cerebro está prófugo junto a novio que reclutó a los temporeros bandidos. Muchacho está separado de hecho de una de las dueñas de la parcela.
Gracias a una corazonada de la propietaria de la parcela ubicada en el sector de El Bajo N° 628, el mediodía del sábado la Bicrim de Melipilla logró abortar un triple homicidio por encargo y detener a dos de los tres sicarios que iban a perpetrar la masacre.
En la audiencia de control de detención efectuada ayer la fiscal Solange Huerta formalizó cargos por porte ilegal de armas y suplantación de funciones contra los temporeros Miguel Antonio Rojas Muñoz (23), con antecedentes de incendiario, y el E.E.A.C. (17).
Según los que saben, en la fecha y hora señaladas, la pareja, acompañada de un tercer delincuente, llegó hasta el portón del predio y luego de explicar a sus moradores que eran detectives e iban tras un asaltante pidió ingresar.
Las hermanas E.R.H.U. (53) y S.R.H.U. (65) se alarmaron con la noticia, pero, desconfiadas y juiciosas, antes de franquearles la entrada les pidieron que se identificaran.
Algo en el brillo exagerado de las placas gatilló en ellas la sospecha y negaron el ingreso.
Apenas se marcharon, las hermanas llamaron a Investigaciones y los sabuesos apañaron a dos de los miembros de la pandilla salvaje cuando huían rumbo al centro de Melipilla.
En el bolso de Miguel Rojas fueron encontradas dos escopetas con 17 cartuchos calibre 12, una pistola de fantasía, un rollo de alambre y otras especies.
En el cuartel confesaron que habían sido contratados para asesinar a los tres hermanos que viven en el predio por el tercer hombre de la historia: El amigo íntimo del marido de la dueña de casa.
Los sicarios debían amarrar a sus víctimas con alambre y luego liquidarlas a escopetazos, para que la ejecución pareciera un asalto. Les iban a pagar un millón de pesos.
Según los imputados, el homicidio lo planificó el ex marido de E.R.H.U., separado en 1996, cuando la mujer descubrió su homosexualidad.
El cerebro de la conspiración, que padece un cáncer terminal al esfínter, pensó que como la separación fue sólo de hecho, si fallecían su mujer y cuñados quedaría en posesión de todos los bienes, ya que no hay hijos.
Su actual pareja, prófugo, fue el encargado de reclutar a los asesinos.
Según la fiscal, los detenidos sostienen que cuando llegó la hora de la verdad se compadecieron y se marcharon de la parcela arrepentidos. En lenguaje jurídico esto se llama ‘tentativa auto-desistida' y no tiene sanción. Por eso los temporeros que postularon a convertirse en chacales de Melipilla sólo fueron imputados por andar porte ilegal de armas y por hacerse pasar por detectives. Rojas fue encarcelado y el menor de edad deberá firmar día por medio en la comisaría mientras dura el juicio.
[Manuel Vega O.]
[17 de julio de 2006]
[©la cuarta]