10 septiembre 2009

Violó a Su Hija de 10

[Chiloé] Obrero ultrajó a su pequeña hija biológica. Solicitan una pena de 20 años de presidio mayor en su grado máximo contra el joven condenado por este aberrante delito sexual.
Los oscuros y aberrantes episodios de violencia sexual sufridos por una pequeña de apenas 10 años fueron sustentados por una contundente evidencia. La prueba no solamente incluyó antecedentes médicos y sicológicos, sino también el dramático testimonio de la víctima, quien reconstituyó la pesadilla vivida al interior de su casa en Castro.
La niña fue ultrajada por su propio padre biológico, en el inmueble que compartían en calle Lillo, en la costanera castreña. Agresiones que según peritos no constituyen un hecho aislado, ya que se habrían repetido en el tiempo.
El sujeto de iniciales J.H.A.G. (35) fue condenado por su responsabilidad en el delito de violación continuada, tras un juicio que concluyó ayer en el Tribunal Oral en lo Penal de la capital chilota.
De acuerdo al fiscal Jaime Sáez, quien instruyó la investigación por este caso, la menor fue el blanco de los ataques del acusado entre fines del 2007 y comienzos del año pasado. "Actos que le causaron un enorme daño y que aún la afectan", aseveró.
La extensión de estas nefastas consecuencias comenzaron a quedar al descubierto, luego que la propia niña se atreviera a romper el silencio.
Así lo confirmó el abogado querellante en esta causa, Milton Cuevas, quien aclaró que "la víctima dio cuenta de todo a un médico del Centro de Salud Familiar de Castro. Desde ese momento se materializó la denuncia que llevó a la detención de su padre por parte de personal de la Policía de Investigaciones".
Durante el juicio oral, la parte acusatoria acompañó a la declaración de la infante a través de circuito cerrado de televisión, el informe de especialistas médicos y policiales, junto a prueba documental.
El conjunto de antecedentes permitió desvirtuar la presunción de inocencia del obrero, a quien no lo benefician atenuantes.
Por su parte, la sala presidida por la magistrado Angélica Monsalve reconoció un agravante de responsabilidad: el parentesco.
Asimismo, el querellante invocó otra circunstancia modificatoria relacionada a la reincidencia específica del delito. "Esta persona fue sentenciada el 2001 por abuso sexual a dos años de pena remitida", aseveró Cuevas.
Bajo este escenario, el abogado solicitó un castigo contra el joven de 20 años de presidio, mientras que el representante del Ministerio Público requirió una pena de 13 años de reclusión. "Una sanción acorde a la extensión del mal causado a la menor y a la gravosidad del ilícito", acotó el persecutor.
El fallo contra el castreño, quien se encuentra en prisión preventiva, será entregado este domingo por el tribunal colegiado.
[10 de septiembre de 2009]
estrella de chiloé]

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