no descartan crimen pasional

[Rengo] No descartan crimen pasional en muerte de fileteadora sanantonina Entre el dolor y la rabia, los amigos de la fileteadora de pescados, Rosalba Sepúlveda Urrutia (40), viven el duelo tras el brutal asesinato que afectó a esta mujer en la estación de trenes de Rengo, en la Sexta Región.
Mientras en la caleta Pacheco Altamirano quienes la conocieron aún no aceptan su muerte, la Policía de Investigaciones de Rancagua trabaja arduamente bajo la dirección del fiscal del caso, Osvaldo Rocco.
De acuerdo a lo que ha señalado Rocco al Diario El Rancagüino, las pesquisas han incluido la confección de un retrato hablado de uno de los posibles autores del homicidio, en el cual tampoco se descarta que haya habido un móvil pasional.
En Rengo la población está totalmente conmocionada por este crimen, ya que seis días antes de que se registrara el hallazgo del cuerpo apuñalado de la ‘Rosita de la Caleta', apareció otro indigente sin vida, el cual fue identificado como Carlos Gómez Berríos. En ambos casos se repite que fueron muertos con armas blancas y abandonados al interior de vagones del recinto ferroviario renguino.
Sin embargo, hasta ahora no hay rastros de el o los culpables de estos crímenes, aunque el fiscal Rocco ha enfatizado que "Carabineros y la Policía de Investigaciones adoptaron todas las medidas necesarias, desde las más básicas hasta las más complejas para recabar evidencias y encontrar al autor de los hechos".
Respecto al asesinato de su amiga, la sanantonina Jéssica Fernández Catalán, reconoció que Rosalba se fue a Rengo para trabajar como temporera, pero que nada se supo de ella hasta su deceso. En todo caso, reconoció que "dicen que ella estaba viviendo con el posible asesino. Yo creo que ella ha tenido que estar con él, porque era su pareja ".

Trasladarán Restos
Por otra parte, hasta el cierre de esta edición, la hermana de la víctima sanantonina, Estervina Sepúlveda, realizaba gestiones en Rancagua para traer su restos hasta el puerto desde donde la fileteadora salió hace algunos meses sin saber que sería la última vez que lo haría.
La víctima tenía un hijo y sus familiares viven en Bellavista.
[14 de mayo de 2007]
[©líder de san antonio]