no hay pistas de asesinos

[Cañete] Ha transcurrido más de un mes desde Roberto Pascal Contreras, agricultor de 81 años de edad, fue muerto a tiros por desconocidos. La muerte de este campesino se ha convertido en un verdadero puzzle policial, dada las escasas pistas que dejaron sus victimarios.
La tarde del 18 de abril, entre las 17 y 23 horas, él o los autores de este crimen, sin presencia de testigos, actuaron sin contemplación en contra del anciano, a quien ultimaron con a lo menos dos impactos de escopeta. De hecho el cuerpo presentaba un número no menor de perdigones.

Pistas Vagas
Salvo estos vestigios, y pistas vagas, son los únicos medios de los que se ha valido la policía uniformada para aclarar este misterioso homicidio ocurrido en el sector de Quilihue, sitio ubicado a unos 18 kilómetros al poniente de Cañete. Durante el transcurso de la investigación se sumó al trabajo investigado personal de la Brigada de Homicidios de la policía civil, sin embargo, las diligencias desplegadas, aún no han arrojado resultados favorables.

No Hay Testigos
El fiscal jefe de Cañete, Luis Elías Morales, dijo que "la lejanía del sector, la ausencia de testigos y la mala comunicación desde el lugar, han sido los elementos que actuado a favor de quienes cometieron este crimen. Lo cierto es que no hay antecedentes concretos". Pese a ello el representante del Ministerio Público señaló que:
"La SIP tiene indicaciones precisas, además a ello se suma el trabajo que está realizando la Brigada de Homicidios, esperamos que este esfuerzo nos llevé a aclarar este hecho", indicó Morales.

Investigación
Cumplidos 36 días de investigación, y contrario, a lo ocurrido con los otros dos homicidios anteriores: la mujer asesinada en el Fuerte Tucapel, y el anciano muerto en una comunidad indígena, que fueron resueltos en tiempo récor, la investigación de este homicidio se ha tornado dificultosa, especialmente, por la carencia de testigos.

Reconstruir
La tarea de ambas policías es reconstruir las últimas horas de vida de este anciano, el que curiosamente, tras ser atacado no sufrió el robo de más de 800 mil pesos -en efectivo- que portaba, de ahí, que la hipótesis del robo haya sido descartada, pero no en su totalidad, ya que este agricultor criaba vacunos, animales muy apetecidos por cuatreros. Por tanto, aún no ha desechado esta hipótesis, que es la que parece cobrar mayor relevancia. No obstante surgen otras versiones que apuntan a cercanos de la víctima.
Sin embargo, aún no se comprobado nada y todo aún es parte de la investigación que lleva el Ministerio Público.
[25 de mayo de 2007]
[©el sur]