condena por producir pornografía infantil

[Antofagasta] Dura y ejemplar condena a productor de pornografía. Es el primer caso de esa naturaleza llevado a juicio en la región con la Reforma Procesal. A cinco años y un día de presidio efectivo fue condenado por el Tribunal Oral de Antofagasta, Vicente Hun Romero, quien fue encontrado culpable del delito de producción reiterada de pornografía infantil.
Se trata del primer caso conocido en la Segunda Región desde la entrada en vigencia de la Reforma Procesal Penal.
El fiscal que investigó el caso, Cristian Aguilar, había solicitado la aplicación de una pena de 8 años y un día de presidio.

Fotografías
Durante el juicio oral pudo establecerse que entre febrero de 2004 y diciembre de igual año, el acusado, en su propio hogar y aprovechando que su hija de 15 años se encontraba durmiendo, procedió a despojarla de algunas de sus vestimentas y sacarle alrededor de 20 fotografías (partes íntimas).
En otra oportunidad de 2005, en el mismo domicilio colocó un lente grabador en el dormitorio de la víctima, sin su conocimiento y autorización, con el objeto de producir igual clase de material, captando, por alrededor de un tiempo, imágenes de su vida privada que grabó y posteriormente editó en una cinta VHS.
En el juicio intervinieron 13 testigos. El Ministerio Público presentó diversas pruebas, con las cuales el Tribunal llegó a la convicción en forma unánime de la culpabilidad del acusado.

Usuarios
El año pasado la Policía de Investigaciones logró desbaratar una red de pornografía que operaba en 70 países y que tenía al menos 1.500 usuarios, 6 de los cuales fueron aprehendidos en Chile.
Dos de los sujetos que subían y bajaban imágenes de contenido pornográfico infantil fueron localizados y detenidos en Antofagasta. Uno de ellos, era precisamente Vicente Hun Romero.
Las indagaciones que consideraron la intervención de 80 policías en el país. Las pesquisas hicieron posible la detención de otros cuatro involucrados en el país. Estos fueron ubicados en Santiago, Concepción y Valdivia.
Las diligencias comenzaron en Alemania, donde se descubrió que operaba una comunidad a través de Internet donde se intercambiaba pornografía infantil, lo que se denominó ‘Everystar'.
Luego de ello comenzó de lleno una investigación a través de Interpol. En junio del 2005 se comunicó a la Policía Internacional de Chile la existencia de ‘usuarios' en nuestro país.

Red
Los integrantes de esta organización delictual tenían un particular modus operandi.
Según antecedentes que manejaba la policía civil, los casi 1.500 usuarios ingresaban a Internet, buscaban la página y accedían al material pornográfico, pero para pertenecer o formar parte de esta ‘comunidad virtual', ellos tenían que enviar un correo electrónico que era respondido con un password.
Una vez que ingresaban tenían acceso utilizando una clave. Además los usuarios debían abastecer constantemente a la comunidad, proveerla de material, subir y bajar imágenes.
[20 de diciembre de 2006]
[©mercurio de antofagasta]