16 mayo 2006

horas de terror vive familia

[Marcelo Henríquez R.] En su propio domicilio. Tomaron de rehenes a familia para robarles. Delincuentes se llevaron cerca de seis millones de pesos entre dinero en efectivo y joyas. Sujetos actuaron armados, los maniataron con cable telefónico y los encerraron en un baño.
Treinta minutos de terror vivió la tarde del sábado una familia penquista, la que fue víctima de un violento robo en su domicilio, ubicado en calle Brasil, lugar hasta el cual llegaron tres sujetos jóvenes, de entre 25 a 35 años, con armas de fuego y cuchillos, las que usaron para intimidarlos, obteniendo un millonario botín compuesto por joyas y dinero en efectivo.
Eran las 19.30 horas y una de las residentes salió a dejar la basura al contenedor respectivo que se encuentra en la calle. En ese momento se le acercaron los sujetos y le apuntaron con un arma en la cabeza, obligándola a entrar a la vivienda sin oponer resistencia.
Una vez adentro, la situación fue advertida por el dueño de casa, quien también fue reducido. Luego de cerrar la puerta de entrada, los tipos amarraron a los moradores utilizando para ello cable de teléfono.
Los gritos que originó la situación, alertaron a la esposa del hombre y a una sobrina, quienes estaban en la cocina. Cuando llegaron al living se dieron cuenta de lo que ocurría y ambas fueron conminadas a arrodillarse en el suelo.
Mientras uno de los sujetos vigilaba a los rehenes, los otros dos registraron cada uno de los dormitorios.
Allí encontraron gran cantidad de joyas, las que fueron avaluadas en unos cinco millones de pesos, además dinero en efectivo, consistente en dólares y moneda nacional, todo por un valor cercano al millón de pesos.
Igualmente sustrajeron un arma de fuego que el dueño de casa guardaba junto a su munición respectiva.
Pero no conformes con esto, los tipos continuaban con las amenazas exigiendo más plata, aunque la propietaria de la casa les indicaba que no había nada más. Por ello les revisaron los bolsillos y los obligaron a entregarles anillos, relojes y celulares.
Antes de irse los metieron a todos en un baño del primer piso y luego escaparon. Al poco rato las víctimas pudieron desatarse y utilizando un teléfono celular que no fue detectado por los malandras llamaron a Carabineros.
Personal uniformado llegó a la residencia y realizó peritajes hasta pasadas las 02.30 de la madrugada, ya que todo el lugar quedó completamente desordenado.
Pero la tarea se complicó, debido a que, como contó la afectada, los sujetos llevaban puestos guantes quirúrgicos para evitar dejar huellas.
"Es primera vez que nos ocurre esto. Antes nos habían robado cosas del auto, cuando lo dejamos estacionado en la calle, pero nunca nos había pasado algo así. Yo creo que aquí las autoridades son las culpables, ya que legislan en favor de los delincuentes y nosotros nos vemos desprotegidos", señaló la afectada. El caso quedó en manos del fiscal Jorge Lorca, quien ordenó pesquisas a la Sección de Investigaciones Policiales de la Cuarta Comisaría Lomas Verdes.
[Marcelo Henríquez R.]
[15 de mayo de 2006]
crónica de concepción]

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