protección policial contra policía

[Camilo Giusti P.] Dirigente denunció supuestas irregularidades en Carabineros de Hualpén. Insólita medida se decretó a favor de vecino de esa comuna, tras grave y confuso incidente protagonizado en una oficina parlamentaria por el jefe de la Cuarta Comisaría local.
El Ministerio Público de Talcahuano ordenó a la Policía de Investigaciones brindar protección especial a un dirigente vecinal de Hualpén, quien durante las últimas semanas ha canalizado una serie de denuncias sobre presuntas irregularidades cometidas por personal de la Cuarta Comisaría de Carabineros de esa comuna.
La vigilancia policíaca fue decretada en beneficio de Gianni Signorelli, vecino de Hualpén que preside el movimiento ciudadano "Monseñor Fernando Ariztía".
La medida se materializó en la tarde del jueves pasado, luego que Signorelli se viera involucrado en un grave y confuso incidente con el mayor Alexandro Luppichini, jefe de la comisaría local, quien habría intentado hacerle firmar, en reiteradas ocasiones, una supuesta declaración policial, relacionada con una denuncia formulada días atrás por un grupo de vecinos del sector.
"Esa tarde el mayor me llamó a mi celular y me señaló que yo debía firmar esa declaración, la cual se basaba en una conversación que sostuvimos por una balacera ocurrida en Hualpén. Yo le dije que primero tenía que leer el documento y que después me comunicaría con él... Momentos más tarde yo me encontraba trabajando en la oficina parlamentaria del diputado Jorge Ulloa y llegó un carabinero de civil con la declaración, señalándome que debía firmarla para entregársela al mayor Luppichini", afirmó Signorelli.
En ese instante, aseveró, el mencionado oficial apareció en el lugar y comenzó a exigirle insistentemente que cumpliese con su solicitud, ante la presencia de varias personas que se hallaban en la oficina. Signorelli, a su vez, le pidió al mayor que se retirara del inmueble, a lo que éste no accedió, tras lo cual el dirigente salió al patio del recinto y se comunicó por su teléfono celular con el fiscal jefe del Ministerio Público de Talcahuano, Raúl Bustos.
"En ese momento él llamó a otra persona y le dijo que yo estaba hablando con el fiscal. Después se fue rápidamente junto al carabinero que lo acompañaba, sin dar explicaciones a nadie", indicó Signorelli.
La gravedad del incidente fue de tal magnitud que a los pocos minutos se constituyó en la sede parlamentaria el fiscal Bustos y el propio diputado Jorge Ulloa. Bustos tomó declaración sobre lo sucedido a Signorelli y a otros testigos del hecho, entre ellos una funcionaria de la oficina y un hermano del concejal Gastón Saavedra. Todos ellos fueron posteriormente trasladados hasta la fiscalía local por efectivos de la Policía de Investigaciones.
"Aquí ocurrió algo de la mayor gravedad. Hago un llamado a las autoridades de Gobierno, tanto a nivel nacional como regional, y al alto mando de Carabineros, ya que en Hualpén se han registrado una serie de situaciones sumamente extrañas, de las cuales este incidente es un claro ejemplo. La fiscalización interna en Carabineros no está funcionando y este tipo de hechos dista mucho de las medidas supuestamente implementadas para lograr un mayor acercamiento entre la institución y la comunidad", manifestó Signorelli.
El dirigente, por estos días, mantiene contacto directo con un equipo de detectives de la policía civil, quienes se encuentran a cargo de su seguridad durante las 24 horas del día.
El Ministerio Público, por su parte, indicó que los antecedentes del caso serían derivados a la Fiscalía Militar de Concepción, debido a que durante el incidente el mayor Luppichini actuó en su calidad de comisario y oficial de Carabineros.

Ministerio Público Investiga Denuncias
Como informó ‘Crónica', el grupo de vecinos representado por Signorelli ha venido denunciando una serie de hechos vinculados al funcionamiento de la comisaría de Hualpén y a las condiciones de seguridad imperantes en la comuna.
De hecho, se indicó, la información proporcionada a través de estas denuncias llevó al fiscal Bustos a iniciar una investigación relacionada con al menos una de estas eventuales irregularidades, cuyos pormenores son manejados bajo estricta reserva por el Ministerio Público local.
Dentro de estos hechos, y a modo de ejemplo, el dirigente mencionó el caso de una intensa balacera ocurrida semanas atrás en Hualpén. La violenta situación fue informada por los propios vecinos a la comisaría, pero, inexplicablemente, la denuncia no figuró en ningún registro policial, pese a que los mismos pobladores se entrevistaron con los jefes de la unidad para solicitar que se iniciara una investigación de lo sucedido.
Fuentes policiales, a su vez, señalaron que antecedentes sobre hechos similares ya han sido puestos en conocimiento de personal de la Sección de Inteligencia Policial (Sipolcar), de la Octava Zona de Carabineros del Bío Bío.
[Camilo Giusti P.]
[8 de mayo de 2006]
[©crónica de concepción]