[Roberto Álvarez] Condenan a 15 años y un día de presidio a sujeto que violó a prostitutas.
Aunque arriesgaba presidio perpetuo, ayer el Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de Antofagasta sentenció a una pena de 15 años y un día, sin ninguna posibilidad de beneficio, a Christian Wenceslao Barrios Gallardo (36) por los delitos de robo contra tres prostitutas, además de violación y abuso sexual en dos de ellas, y por robo con violación cometido a una ciudadana argentina que ejercía el comercio sexual en un hotel del centro de la ciudad.
Pese a la oposición del juez Luis Sarmiento al considerar que no se habían acreditado los delitos de violación, el tribunal el viernes pasado condenó al sujeto, tras un Juicio Oral de tres días, donde el hombre, de religión evangélica, en forma voluntaria declaró que "jamás he hecho daño a nadie", negando la autoría de los delitos.
Según la acusación del fiscal Cristián Aguilar, Barrios ingresó el 26 de agosto a una vivienda donde se ejercía la prostitución, llamada ‘La Casona', en el centro de Antofagasta, donde amenazó con un arma cortopunzante a tres mujeres, a quienes robó cerca de $ 50 mil, procediendo a abusar sexualmente de R.P.R. y C.O.S., esta última de 14 años.
El 24 de octubre realizó un acto similar en contra de una ciudadana argentina, conocida como La Jaque, e identificada con las iniciales J.L.C., a quien la amenazó con un arma cortopunzante, la amaniató y abusó sexualmente, siendo capturado por Carabineros a las pocas cuadras del hotel con un porta CD y con más de $ 100 mil de propiedad de la víctima.
En su declaración, el sujeto, dijo que "mi error fue haberle mentido" acusando a ésta última de planear los delitos, debido a que luego de una supuesta relación de cinco meses se habría enterado que no era ingeniero de minera La Escondida, sino que repartidor de una empresa de pollos.
Esta aparente venganza fue desestimada por el tribunal tras escuchar las declaraciones de las víctimas, testigos, y peritos, y que "acreditó en forma fehaciente y sin duda razonable", que el hombre había cometido los delitos, pudiendo incluso haber llegado a una pena de presidio perpetuo efectivo (40 años de presidio sin beneficios intrapenitenciarios), según indicó el fiscal Cristián Aguilar.
Su abogado particular, Óscar Retamal de Requesens, señaló que estaba conforme con el veredicto, ya que se había eliminado "el fantasma del presidio perpetuo", aunque precisó que analizan el fallo.
Al finalizar la audiencia, una hermana del sujeto, en compañía de su hijo, insultó al fiscal Aguilar e intentó golpearlo, siendo detenida por personal de Gendarmería. "No podrá dormir por haber metido a mi hermano a la cárcel", le gritó la mujer, acompañada de su pequeño hijo, mientras el fiscal entraba a la sala y los gendarmes procedían a sostenerla.
[Roberto Álvarez]
[18 de mayo de 2006]
[©la tercera]
18 mayo 2006
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