abusaba de su sobrina

[Arica] A prisión reincidente en delitos sexuales por abuso de sobrina. La primera condena contra un sujeto que abusó sexualmente de una mujer adulta, consiguió la Fiscalía del Ministerio Público de Arica. El Tribunal Oral sancionó con la pena efectiva de 3 años y 1 día a Sergio Luis Véliz Pérez, por este delito cometido el 7 de agosto de 2004 en contra de su sobrina E.P.V.V., de 22 años.
El fiscal del Ministerio Público, Richard Toledo, valoró el criterio del tribunal, señalando que "generalmente por machismo estos casos cuesta probarlos, más aún donde no hay lesiones evidentes y existen sólo testimonios de personas adultas. Teníamos algunos testigos que resultaron creíbles para el tribunal, por lo que esta sentencia nos satisface como Ministerio Público, ya que se valoró con bastante objetividad la prueba ofrecida".
El acusado presentaba una condena del año 1999 de 400 días de presidio por la violación de su hija y otra denuncia el 2004 por abuso sexual en contra de otra de sus hijas. En esta última causa, la menor se desistió, tras presentar una carta ante el Ministerio Público, negando los hechos.

Abuso Sexual
La investigación del Ministerio Público estableció que Sergio Véliz Pérez, realizó tocaciones en los pechos, nalgas y genitales de la joven de 22 años, cuando estaba de visita y en estado de ebriedad en su hogar. La mujer se resistió gritando y forcejeando con su
agresor. Justo cuando pedía auxilio, su pololo llegó a la casa, por lo que el acusado la dejó y abandonó la vivienda.
La víctima acudió a Carabineros para denunciar los hechos. Por la edad de la mujer, en la comisaría no dieron total crédito a su relato, por lo que la policía omitió una diligencia importante: la constatación de lesiones en el servicio de urgencia. Por la ausencia de este peritaje, el Ministerio Público podría haber perdido el juicio, pero el Tribunal Oral consideró creíbles y suficientes los testimonios de la joven y su pololo para condenar al acusado.
El caso tuvo una nueva complicación en agosto pasado, cuando la señora de Pérez Véliz, instó a la joven a firmar una carta en la que se desistía de la denuncia y declaraba que todo era falso. Esta misma estrategia ya había sido utilizada hace dos años por la misma mujer, para lograr que su hija retirara la denuncia por abuso sexual cometido por su padre.
En el juicio oral, la víctima reconoció haber firmado la misiva, pero señaló que había sido presionada por la familia, para evitar que su abuela se enfermara. Tras justificar esta situación, la joven reiteró que su tío había abusado sexualmente de ella.
Asimismo, el inicio del juicio oral tuvo otro contratiempo. Sólo horas antes de que se iniciara, el acusado fue detenido por Carabineros por el delito de violación de morada, luego que ingresara sin autorización al hogar de sus hijas, de las cuales se alejó tras la última denuncia de abuso sexual de una de ellas.
[Ximena Astudillo]
[15 de noviembre de 2006]
[©la tercera]