08 septiembre 2006

cinco años por robo en casa desocupada

[San Antonio] Les salió caro robar para beber: condenados a cinco años y un día. Nunca se les pasó por la mente que su accionar los llevaría a una pena de cinco años y un día de cárcel. Una pareja de ladrones aseguró durante el juicio que sólo habían ingresado a una casa de veraneo de Llo Lleo para tomar algunas cosas, venderlas y continuar bebiendo, pero la Fiscalía de San Antonio igual los persiguió penalmente por el grave delito de robo en lugar habitado y obtuvo contra cada uno de ellos una pena de cinco años y un día de cárcel.
Peter Maturana Ripton, domiciliado en Santiago, y Christian Carrasco Naranjo, con domicilio en Llo Lleo, fueron acusados por la fiscal Carolina Montero y la ejemplarizadora condena fue dictada por los jueces del Tribunal de Juicio Oral en lo Penal de San Antonio Roberto Guzmán, Flavia Donoso y Julio Castillo.
Los magistrados reiteraron jurisprudencia al señalar en el fallo que las casas de veraneo o descanso estival pueden ser consideradas como cualquier morada o residencia de uso permanente.

Paletas y Pelota
El tribunal, sobre la base de los antecedentes presentados en juicio por la fiscal, dio por acreditado que el 9 de enero de 2006, alrededor de las 15 horas, los acusados, ambos de 21 años de edad, ingresaron a una casa de la Villa Sol de Macul, sector Las Cruces, forzando una ventana para sustraer una aspiradora, un hervidor de agua, un par de paletas y una pelota de tenis, las que abandonaron al ser sorprendidos por Carabineros.

Nutridos Prontuarios
La fiscal acompañó en el juicio antecedentes de ambos acusados: Ripton había sido condenado a tres años y un día por el mismo delito en 2004, pero se le había otorgado el beneficio de libertad vigilada y gozaba de esta al momento del robo en Llo Lleo. Carrasco, en tanto, registraba autos de procesamiento por robo con violencia en San Antonio y por hurto frustrado en Rancagua, además de una condena en San Antonio por violación de morada.

Fiscal Pedía 7 Años
La fiscal pidió contra ellos una pena de 7 años de cárcel, pero el tribunal colegiado les reconoció a los acusados la atenuante de reparación del mal causado, aunque también acogió a solicitud de la fiscal la agravante de pluralidad de malhechores y no les reconoció colaboración en la investigación, como solicitó la defensa de los enjuiciados.

Defensa
La defensa de los acusados también intentó convencer a los magistrados de que el delito no llegó a la fase de consumación ya que los jóvenes delincuentes habían sido detenidos por la policía, pero el tribunal coincidió con Fiscalía en que las especies ya habían sido sacadas del ámbito de protección de sus propietarios y por tanto debía condenárseles por delito consumado.
[8 de septiembre de 2006]
líder de san antonio]

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