Lo habrían ayudado a ‘sacar de circulación' a Hans Pozo, según escribió Jorge Martínez en mensaje póstumo. Suicida vincularía en carta a pareja de polis. Familiares estudiarían interponer una querella por homicidio para aclarar muerte del comerciante. En la misiva dice que pagó por trabajo a dos supuestos carabineros. La controversia por la muerte de Jorge Martínez, sindicado como presunto autor del crimen y descuartizamiento de Hans Pozo, tiene a sus deudos estudiando la presentación de una querella contra los carabineros del OS-9 que el sábado pasado realizaron el operativo que terminó con el sospechoso muerto de un balazo en la cabeza, en su distribuidora de helados, de San Ramón.
Mientras para la policía uniformada y el fiscal Pablo Sabaj está claro que Martínez se autoeliminó, sus familiares insisten en que fue abatido.
La familia del dirigente sindical afirma sus dichos en la carta que dejó, en la que dice tener miedo de que le pase algo.
En la misiva relata cómo conoció a Hans y asegura que el muchacho lo extorsionó con contarle a su familia que era su hijo.
Dice que no dudó en pasarle plata como el muchacho le pedía, ya que recordaba que en 1984 tuvo una corta relación premarital con una mujer rubia y por lo mismo pensó en la probabilidad de que Hans efectivamente fuese su hijo.
Según trascendió, Martínez cuenta en la carta que la cosa se puso negra cuando Pozo fue a molestarlo a su casa, en La Granja, y él decidió denunciarlo en una comisaría del sector sur de la capital, que no especifica.
El Trato
Afirma que el carabinero que lo atendió le propuso ‘sacar de circulación' a Pozo, no asesinándolo ni golpeándolo, sino que mandándolo a ‘un hotel del Estado', es decir, a la cárcel, para lo cual le exigió plata.
El pago se concretó en una bencinera que tampoco precisa. Allí llegaron los dos policías en un camión repartidor de cecinas, continúa en el manuscrito.
El comerciante asegura que los carabineros le pidieron más dinero e informaron que el ‘trabajo' ya estaba hecho.
Precisa que se vio obligado a efectuar un segundo pago, pero, lejos de recuperar su tranquilidad, comenzó a ser presa del miedo. Se había librado de un extorsionador, pero caído en manos de otros dos.
Fue entonces que decidió escribir la carta, que habría finalizado el 4 de abril, un día después de que aparecieron el tronco y las manos sin huellas de Hans Pozo, en San Bernardo y Puente Alto, respectivamente.
Sangre
El fiscal Pablo Sabaj asegura que las pruebas científicas reunidas por carabineros de Criminalística y del OS-9 implicarían a Martínez en el crimen de Pozo, en referencia a la sangre del muchacho hallada en el furgón del heladero.
Sin embargo, llama la atención que después de haber hecho de todo para impedir la identificación de Hans -extracción de huellas, tatuajes y hasta de la nariz- el presunto homicida haya descuidado un detalle tan obvio como no limpiar la sangre que supuestamente quedó en su furgón, en el cabezal del asiento del copiloto y el asiento trasero.
Respecto de la carta, trascendió que los investigadores han desestimado la verosimilitud de los hechos relatados y creen que se trata de una forma que empleó el suicida para salvaguardar su honor y la tranquilidad de su familia.
La viuda Roxana Godoy reiteró ayer en una entrevista con Mega sus dudas de que Martínez se haya suicidado.
Habló Ex Inspector
El ex inspector de Investigaciones José Miguel Vallejos comentó anoche el caso para el programa Morandé con Compañía del canal Mega.
Citando como fuente "mis colegas", en una especie de vocería de su ex institución, Vallejos reveló que la pista para dar con el victimario Jorge Martínez surgió del trabajo de efectivos de la Brigada de Homicidios.
Contó que los polis detectaron una garita del paradero 30 de Santa Rosa, donde Hans Pozo había pernoctado con cuatro homosexuales noches antes de ser asesinado. Cada uno de ellos fue entrevistado por separado y todos coincidieron en citar el nombre de Martínez.
Así, añadió, llegaron a la heladería y entrevistaron a Robinson Martínez y dejaron citado a su hermano mayor para conversar sobre el tema. Sin embargo, acusó, el fiscal Sabaj no le dio una orden de investigar a la policía civil y sí pasó la diligencia al OS-9 de Carabineros.
Advirtió Vallejos que hubo un mal procedimiento de los polis, que desembocó en la muerte del victimario y en duda sobre su presunto suicidio.
[13 de abril de 2006]
[©la cuarta]
13 abril 2006
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