Hombre se lanzó al tren tras ser buscado por abuso sexual. Se llevó su secreto a la tumba. Desesperado, al verse acorralado por la policía, se arrojó al paso de un convoy ferroviario y cumplió con el fatídico destino que él mismo anticipó en una carta encontrada en su domicilio, en la cual indicó que se quitaría la vida para no enfrentar la difícil situación que le deparaba ante la justicia.
El hombre, un ex marino de 51 años, era investigado desde hace un tiempo a la fecha por el fiscal Enzo Osorio, del Ministerio Público de Talcahuano, a raíz de diversas denuncias que lo imputaban como el autor de una serie de delitos de connotación sexual contra sus hijas.
De hecho, los antecedentes recabados a raíz de las diligencias del caso llevaron al fiscal a solicitar una orden de aprehensión en su contra, la cual fue autorizada el jueves por el Juzgado de Garantía porteño. Su búsqueda fue encomendada a detectives de la Brigada de Delitos Sexuales (Brisexme), de la Policía de Investigaciones, quienes esa misma tarde efectuaron un allanamiento en su casa, sin poder capturarlo.
Sin embargo, en el lugar los policías hallaron la mencionada misiva escrita por el fugitivo, tras lo cual se intensificaron las pesquisas para ubicar su paradero.
Los operativos se prolongaron por toda la noche. Como parte de una dramática carrera contra el tiempo, cerca de las siete de la mañana de ayer el hombre llegó hasta la línea férrea situada frente a la población Leonor Mascayano, donde finalmente se lanzó al paso de un tren de pasajeros con destino a Santiago. Su muerte fue constatada por los mismos policías que se encontraban tras su pista,
quienes informaron al fiscal del fatídico desenlace del caso.
[30 de abril de 2006]
[©crónica de concepción]
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