Sospechan intencionalidad tras mortal brebaje. Dicen que esos pobladores aportaron dinero para bebida y no bebieron el trago.
A homicidio y no una fatal jugada del destino atribuyen lo ocurrido familiares de uno de los tres vecinos antofagastinos que murieron la semana pasada, tras beber un fuerte brebaje en el hogar de uno de ellos.
Hasta este Diario llegaron ayer parientes de Wladimir Henríquez Castillo, sus hermanas Ximena y Marcela, planteando sus dudas respecto a las circunstancias que rodearon la muerte del trabajador de 35 años.
Este dejó de existir el viernes mientras permanecía internado en la Unidad de Tratamiento Intermedio (TIM) del Hospital Regional "Dr. Leonardo Guzmán", convirtiéndose así en la segunda víctima fatal del brebaje tras el deceso el miércoles de Efraín Vicencio Pizarro, de 56 años. La cifra se elevó a tres el domingo, al fallecer Ronaldo Casanova Galleguillos (72).
Mortal Reunión
Según relató Ximena, Wladimir trabajaba en una empresa minera y el martes 6 se encontraba en Antofagasta disfrutando de sus días de descanso.
Fue entonces cuando recibió la invitación para ir al hogar de Vicencio Pizarro, con quien al igual que con el resto eran conocidos y no amigos, recalcó, ya que todos pertenecen a antiguas familias del sector.
Ese día, recordó, su hermano fue hasta la casa de Efraín cerca de las 23 horas y permaneció allí sólo una hora, tomando dos vasos y medio del brebaje. Luego se retiró a su hogar, acostándose.
El poblador despertó a las 6 de la mañana -debía subir a la mina- y cayó al suelo, por lo que su esposa y Ximena decidieron llevarlo al hospital, al que esta última también llevó un vaso con el trago que alcanzó a rescatar para su análisis.
Sin embargo- dijo- a las 12.30 horas y en un acto que calificó como negligente lo enviaron de vuelta a su casa debido a que allí no podían hacer nada y que Wladimir estaba borracho.
Pese a ello, al enterarse que Efraín Vicencio- quien fue el anfitrión -había muerto, asustados a las 15.30 horas decidieron llevarlo nuevamente al Servicio de Urgencia del principal recinto médico de la región. Cerca de las 19 horas, precisó, quedó finalmente internado.
Sospechas
Según contó la antofagastina, su hermano alcanzó a contar que fueron seis los participantes en la reunión en el hogar de Vicencio, ubicado a la altura del 6.300 de calle Machu Pichu de la población Prat "B".
De ellos, el dueño de casa, junto a Wladimir y Ronaldo Casanova, tomaron vasos del brebaje y John Oliveros González (40) alcanzó sólo a probarlo. De hecho, estuvo también hospitalizado hasta el martes en forma preventiva, en vista de lo ocurrido con los tres primeros.
Los otros, precisó Ximena Henríquez, ni siquiera probaron el trago pese a que "amablemente pusieron plata para la bebida", puntualizó.
Ello levantó las sospechas de la familia, para la cual todo fue intencional y tendría como motivación la envidia, "ya que nos iba mejor...fue una mezcla bien hecha altamente tóxica", sentenció Ximena.
Así descartan que Efraín Vicencio haya sido quien preparó el mortal trago, ya que saben que el poblador horas antes de la reunión lo mostró en la calle, afirmando que se lo habían regalado.
¿Quién? no lo saben, por lo que esa y sus otras interrogantes es la que desean que la justicia aclare, ya que están convencidos que se trató de un homicidio que debe ser investigado para dar con los culpables.
[15 de junio de 2006]
[©estrella del norte]
16 junio 2006
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