[Cañete] Sólo una intervención quirúrgica de alto costo le podría reparar el daño causado por el ataque con arma blanca que recibió una humilde mujer campesina a manos de un violento y cobarde victimario. La vida de Marta Huaiquiñir Millabur, hoy con una cicatriz de seis centímetros, cambió radicalmente desde el minuto en que fue atacada con un cuchillo en su rostro.
Este hecho ocurrió el 11 de abril del año 2004 en el sector de Alto Rihue en la localidad de Huetelolén, y desde aquella fecha el autor de este grave incidente, había logrado evadir la acción judicial. No obstante, la astucia y constancia de la policía uniformada no permitió que este cobarde ataque quedara en la impunidad, ya que Gabriel Cayupi Huentelao, obrero forestal de 33 años de edad, fue detenido por efectivos de la SIP y puesto a disposición de la justicia.
Prisión Preventiva
En esta instancia, el Ministerio Público solicitó la prisión preventiva de este sujeto, a quien se le imputa el delito de lesiones graves "gravísimas". El fiscal subrogante, Rodrigo Martínez Walker, dijo que "se trata de una lesión que sólo puede ser reparada con intervención quirúrgica, pero lo peor de todo es el daño psicológico que ha sufrido la víctima".
Las secuelas estéticas y psicológicas producidas por esta acción criminal son las que debe cargar esta humilde mujer, que no cuenta con los recursos económicos para someterse a una operación de alto costo, sino que debe conformarse con que su agresor, hoy, esté tras las rejas, a lo menos, por 4 meses, que fue el plazo fijado para el cierre de la investigación.
Además esta mujer debió vivió vivir todo este tiempo con el evidente temor de ser atacada nuevamente, puesto que Cayupi la había amenazado de muerte, en caso de ser denunciado a la justicia.
[2 de junio de 2007]
[©renacer de arauco]
02 junio 2007
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