lo atacaron con gigantesco sable

[San Antonio] Eran cerca de las 5.45 de la madrugada cuando Víctor Guerrero Letelier, de 66 años, abandonó su casa de la población Bruselas 1 para dirigirse a pie a la feria mayorista Acoma de Bellavista, donde trabaja como guardia de seguridad.
"Siempre me iba tranquilo, porque en los 12 años que llevo trabajando en la feria, nunca me había pasado algo", relató ayer Guerrero.
Pero en esta ocasión fue distinto. Su tranquilidad apenas duró las dos cuadras que alcanzó a caminar. En calle Litoral, en medio de la oscuridad y el frío matinal, fue abordado violentamente por dos individuos jóvenes, quienes actuaron con sus rostros descubiertos.
Uno de ellos extrajo de entre sus ropas un sable de más de 70 centímetros. El hampón lo amenazó de muerte y le dijo que entregara "toda la plata".
En una reacción innata, el conocido guardia trató de quitarle la gigantesca arma blanca, pero sólo consiguió un corte en la mano que comenzó a sangrar profusamente.
Los antisociales, aprovechando su superioridad numérica, lo registraron completamente. Al comprobar que no portaba dinero, entraron en un estado de furia y comenzaron a propinarle una brutal paliza con golpes de pies y puños. Incluso, uno le pegó en la cabeza con un elemento contundente.
Totalmente fuera de sí, los delincuentes no encontraron nada mejor que tirar al anciano por una quebrada. Tras rodar más de cuatro metros y luego de que los vándalos se dieron a la fuga, don Víctor le hizo honor a su apellido y, como pudo, continuó el camino hacia la feria mayorista. Responsable como él solo, no quería llegar atrasado -entraba a las 6- a la pega.
Un par de horas después concurrió hasta el contenedor policial de Bellavista para interponer la denuncia. Luego fue a Urgencia, donde el médico de turno constató que presentaba policontusiones y erosiones en las rodillas y en la cabeza. "Eran cabros jóvenes de no más de 22 años. Por suerte que nunca les di la espalda, de haberlo hecho, de seguro me hubiesen clavado el sable", relató ayer Víctor Guerrero, mientras en su casa trataba de recuperarse de sus lesiones.
[5 de junio de 2007]
[©líder de san antonio]