A la pena de doce años de cárcel fue condenado un sujeto que violó a su hija de 11 años de edad en reiteradas oportunidades.
El sentenciado fue identificado como el mecánico W.C.R.
El individuo cometió los abusos entre mayo y julio del año pasado. Según lo que pudo acreditar el fiscal Raúl Arancibia, el sujeto violó en reiteradas oportunidades a la niña.
Durante el juicio oral el fiscal presentó la declaración de la menor, quien explicó que su padre era muy violento con toda la familia y que enviaba a su madre a comprar para quedarse a solas con ella en la casa y violarla.
Esos mismos hechos los repetía entre dos a tres veces durante la semana.
La menor confirmó en su testimonio que no se atrevió a denunciarlo por temor. Además la joven tenía miedo de decir que estaba amenazada. Su padre le indicó que si lo delataba se iban a quedar sin comida.
Sin embargo, cuando la menor se enteró que su padre fue obligado a abandonar la casa por las constantes agresiones contra la madre de la víctima es que se atrevió a contar lo que sufría.
En el juicio también declararon la madre, la perito sicóloga que confirmó la veracidad del relato y de los daños emocionales sufridos por la menor, y la médico que certificó las lesiones físicas en la víctima que daban cuenta de las violaciones.
Terminada la presentación de pruebas, el tribunal resolvió por unanimidad condenar al acusado a la pena de 12 años de presidio aunque el fiscal Raúl Arancibia había solicitado la pena de 20 años de prisión.
[1 de junio de 2006]
[©estrella de iquique]
01 junio 2006
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario