Estuvo ‘muerto' por tres meses. Lo habían sepultado y ahora lo están juzgando. Fue dado por muerto, fue sepultado y hoy comparece ante la justicia. Puede sonar insólito, pero es verdad. Se trata de C.J.R.I., hombre al que se acusa de haber violado a una sobrina de 16 años, en noviembre de 2004, para luego desaparecer. La historia señala que el hombre, luego de cometer el ilícito, se esfumó, hasta que el 2 de abril lugareños del sector Cullinco, en la comuna de Los Alamos, encontraron el cuerpo sin vida de un hombre, al borde de un riachuelo, quien no portaba ningún tipo de documentación. Del hecho luego se enteró la hermana del sujeto, quien además es la madre de la menor violada. La mujer informó a Carabineros de que hacía meses que no se sabía nada de su hermano, por lo que pidió información respecto del cuerpo encontrado. Los uniformados le mostraron unas fotos y tras verlas, señaló que se trataba de su hermano. Después fue al Servicio Médico Legal de Concepción, donde ratificó que los restos eran del sujeto. Los antecedentes fueron puestos a disposición de la Fiscalía de Lebu, por lo que luego el cuerpo fue entregado a los familiares. Así se dio curso al velorio y posteriormente a su sepultación. Hasta allí todo era normal, pero esto se rompió cuando, a principios de julio, la madre recibió una llamada telefónica de una persona que se identificó como su hermano. Esto impactó a la mujer, quien muy nerviosa, dio aviso a Carabineros y a la fiscalía. De inmediato se iniciaron algunas diligencias, las que revelaron que el sujeto efectivamente estaba vivo y que la llamada había sido realizada desde una cabina telefónica de la localidad de Puerto Aysén, en la Undécima Región.
Detención y Juicio
Con todos estos antecedentes, el fiscal Andrés Ortiz se contactó con el fiscal jefe de Aysén, Lorenzo Avilés, a quién le informó lo sucedido. De inmediato se ordenaron diligencias, las que finalizaron con la detención del individuo, hecho que se concretó días más tarde. Luego de ello el hombre fue trasladado hasta nuestra región, donde compareció ante la fiscalía. Ayer se inició el juicio en su contra, donde el Ministerio Público, representado por el fiscal Ortiz, solicita una pena de diez años y un día de presidio para el tipo. Entre los testimonios dados a conocer en el tribunal, se contó los de la víctima y de algunos detectives de Aysén. Ambos se realizaron por intermedio de videoconferencias. En el primero de los casos para evitar el contacto visual entre la joven y el imputado, y en el segundo, debido a la distancia entre nuestra región y la Undécima. El proceso se retomará el lunes, debido a la ausencia de un perito.
[5 de agosto de 2006]
[©crónica]
05 agosto 2006
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